Para cuando surja el próximo patógeno, debiera ser ampliamente accesible la tecnología que permite que el centro de testeo en el nuevo aeropuerto de Berlín obtenga resultados en menos de una hora. (Photo by Thomas Lohnes / AFP)
Para cuando surja el próximo patógeno, debiera ser ampliamente accesible la tecnología que permite que el centro de testeo en el nuevo aeropuerto de Berlín obtenga resultados en menos de una hora. (Photo by Thomas Lohnes / AFP)

Mientras la variante delta sigue propagándose por gran parte del mundo, las vacunas continúan escaseando. Lo peor es que están siendo acaparadas por países ricos, pese a que la necesidad en otros lugares es inmensa. Hay que culpar a la política. Sin embargo, hay que elogiar a los científicos por la existencia de las vacunas.