“(Actuar) de forma estratégica y global es lo que de verdad le sirve al interés nacional de cada país: nadie está seguro hasta que todos estén a salvo”, dijo el funcionario en una sesión informativa virtual en la que pidió el fin del “nacionalismo de las vacunas”.
Se han reportado incrementos en los contagios en naciones que parecían tener contenido el avance del virus, como Vietnam, que hasta hace sólo tres meses no registraba transmisiones domésticas gracias a sus agresivas iniciativas de mitigación.
“Lo que observamos no es simplemente un resurgimiento. Creemos que es señal de una nueva fase de pandemia en Asia-Pacífico”, dijo Kasai, agregando que los países estaban en mejores condiciones de reducir la alteración de vidas y economías cuando combinaban la detección temprana y la respuesta para controlar las infecciones.
Si bien se han observado mutaciones, la OMS todavía ve al virus como “relativamente estable”, dijo Kasai.
Por su parte, el asesor principal de la OMS, Bruce Aylward, afirmó que el mundo debe administrar vacunas contra la gripe generalizadas este año para ayudar a prevenir el riesgo de complicar las infecciones por coronavirus.
Maria Van Kerkhove, epidemióloga de la organización, indicó que los estudios hasta la fecha mostraban que menos del 10% de la población tiene evidencia de anticuerpos contra el virus.
La OMS también recordó a las farmacéuticas que sigan todos los pasos necesarios de investigación y desarrollo al crear una vacuna. Socorro Escalante, funcionaria técnica y asesora de políticas de medicamentos, dijo que la OMS se estaba coordinando con Rusia, que este mes se convirtió en el primer país en otorgar la aprobación regulatoria para una vacuna COVID-19.