El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, intensificó sus críticas al actual nivel de las tasas de interés, mientras que los operadores apuestan a que los políticos deberán elevarlas aún más para controlar las crecientes expectativas inflacionarias.
Lula calificó la postura del banco central sobre las tasas como una “vergüenza” e instó a las empresas a quejarse por los costos de endeudamiento.
“No hay justificación” para que la tasa de referencia Selic se encuentre en su actual nivel de 13.75%, dijo el lunes durante la ceremonia de juramento de Aloizio Mercadante como director ejecutivo del banco estatal de desarrollo, BNDES, en Río de Janeiro.
Los mercados están cada vez más preocupados por sus comentarios. Los operadores, que en octubre esperaban recortes de tasas para marzo, ahora apuestan por un alza adicional de un cuarto de punto porcentual para mayo.
Se estima un recorte de tasas recién a fines de año. La mayoría de los economistas encuestados por el banco central ahora pronostican el comienzo del ciclo de relajación recién para noviembre.
El líder izquierdista de 77 años se ha enfrentado durante semanas con el banco central por mantener altas las tasas de interés para frenar los aumentos de los precios al consumidor, una estrategia que, según Lula, está obstaculizando el crecimiento y perjudicando a los más necesitados de Brasil.
Los encargados de política monetaria mantuvieron las tasas sin cambios la semana pasada, aduciendo preocupaciones sobre las crecientes expectativas de inflación que se están “alejando” de sus objetivos en un escenario fiscal “particularmente incierto”.
Lula dijo que su crítica no se refería a si el banco era independiente o no, sino al hecho de que la institución sigue manteniendo altas las tasas. En Brasil, “el problema es que hay una cultura de vivir con altas tasas de interés y eso no se combina bien con las necesidades y la inversión”.
Los actuales niveles de la tasa Selic hacen que sea “imposible” impulsar el crecimiento, dijo el mes pasado Lula durante una entrevista televisiva. Agregó que consideraba que la ley de autonomía del banco era una “tontería” y sugirió una meta de inflación superior al 4.5%.
El banco central de Brasil publicará el martes las minutas de su reunión de tasas del 31 de enero y 1 de febrero.