La matanza cometida por tropas rusas en la localidad de Bucha, próxima a Kiev, trae a la memoria masacres acontecidas durante la guerra de los Balcanes o el conflicto de Chechenia, donde se produjeron la mayoría de los episodios de este tipo vividos en Europa después de la Segunda Guerra Mundial.
La masacre más grave de todas fue la de la localidad bosnia de Srebrenica, en 1995, donde más de 8,000 personas fueron asesinadas por el ejército serbobosnio, en el único episodio en Europa reconocido por la Justicia como genocidio desde 1945.
El genocidio de Srebrenica
Tras un asedio que se prolongó durante dos años, el 11 de julio de 1995 el enclave bosnio de Srebrenica, una zona protegida por cascos azules holandeses de la ONU, fue ocupado por tropas serbobonsias bajo el mando del general Ratko Mladic.
En los días siguientes más de 8,000 hombres y niños bosnios de religión musulmana fueron asesinados por el Ejército serbobosnio y enterrados en fosas comunes.
El Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) condenó a Mladic y a su jefe político, Radovan Karadzic, a cadena perpetua por genocidio, el único reconocido por la Justicia en Europa después de la Segunda Guerra Mundial.
Alrededor de 50 personas han sido condenadas hasta ahora por la justicia internacional y los tribunales de Bosnia-Herzegovina y Serbia en relación con la masacre.
El papel de los militares holandeses, encargados de proteger Srebrenica, ha sido siempre cuestionado. En el 2002 el Gobierno holandés en pleno dimitió para asumir “la responsabilidad de la comunidad internacional en la matanza”.
En el 2019, el Tribunal Supremo de Holanda dictaminó que el estado holandés era responsable “en un 10%” de la muerte de 350 hombres musulmanes durante la masacre por no ofrecerles “la oportunidad de refugiarse” dentro de la base holandesa cuando lo pidieron.
La matanza de Vukovar
El 18 de noviembre de 1991, la localidad croata de Vukovar cayó en manos del ejército serbio-yugoslavo y unidades paramilitares serbias.
Después de conquistar la ciudad, los serbios sacaron a dos centenares de croatas que se habían refugiado en el hospital local y los trasladaron a una granja situada en Ovcara, donde los golpearon durante horas antes de asesinarlos a tiros. Al menos otras 300 personas desaparecieron.
Durante el juicio a los responsables de la matanza, el TPIY constató que fueron identificadas al menos 194 víctimas y los jueces concluyeron que los cargos solamente podían considerarse como crímenes de guerra y violación de las costumbres de la guerra (y no como crímenes de lesa humanidad) por haberse cometido contra prisioneros de guerra y no civiles.
La mayor condena, 20 años de prisión, recayó en ex coronel del Ejército yugoslavo Mile Mrksic, conocido como el carnicero de Vukovar.
Matanza de Racak en Kosovo
El 15 de enero de 1999, las fuerzas serbias dieron muerte a 45 albano-kosovares, en su mayoría varones, alegando que se trató de una operación legítima de su policía antiterrorista y que los muertos eran combatientes del UCK.
Sin embargo, el entonces jefe de la misión de la OSCE para Kosovo, el norteamericano William Walker, visitó Racak el 16 de enero y, al ver los cadáveres todavía desparramados en las afueras de la aldea, acusó a las autoridades serbias de haber cometido una matanza deliberada de civiles albano-kosovares.
La investigación llevada a cabo por médicos forenses extranjeros no pudo confirmar la versión serbia de que fueran combatientes los asesinados, aunque descartó que las víctimas hubieran sido objeto de tortura u otras crueldades, como había sugerido en un primer instante el representante norteamericano.
Las muertes de Racak provocaron un giro radical en la actitud internacional hacia la crisis de Kosovo, que culminó con los bombardeos aliados sobre Yugoslavia.
La guerra de Chechenia
Durante la guerra de Chechenia, librada por Rusia contra los rebeldes separatistas chechenos, Human Rights Watch (HRW) denunció varias matanzas en los alrededores de Grozni.
En diciembre de 1999, se produjo la de Aljan Yurt, donde, según la organización humanitaria, fueron asesinados cuarenta civiles. En enero siguiente, el barrio de Staropromislovski de la capital chechena fue escenario de otra masacre y en la localidad de Aldi se produjo la tercera, en febrero del 2000. En total, según los datos de HRW, los militares rusos ejecutaron a sangre fría a más de 130 personas.
Osetia del Sur
En la guerra en Osetia del Sur librada por tropas georgianas y rusas en el 2008, Amnistía Internacional (AI) denunció diversos crímenes contra la población civil.
En la noche del 7 al 8 de agosto, durante el asalto de las tropas georgianas a Tsjinval, capital de Osetia del Sur, docenas de civiles fueron asesinados durante la operación, según los datos de AI.