Qatar, el mayor vendedor mundial de gas natural licuado (GNL), reconoció a los consumidores que no tenía la capacidad de enfriar los precios de la energía, mientras que las siderúrgicas británicas dijeron que podrían verse obligadas a detener la producción ante los crecientes costos.
El repunte de la actividad económica después de la relajación de los confinamientos impuestos para frenar el avance del coronavirus expuso una escasez de existencias de gas natural y otros suministros de combustible, lo que ha provocado apagones en algunos países.
Para mantener las fábricas abiertas y los hogares calefaccionados, los ejecutivos de la industria y los gobiernos tienen que pagar más por la energía y volver al carbón y al petróleo, los combustibles fósiles más contaminantes.
Los futuros del crudo tenían alzas de más de US$ 2 el barril el lunes, y los analistas predicen que los precios se mantendrán altos.
Los precios del GNL, que cayeron a mínimos históricos en el apogeo de los confinamientos por la pandemia, se han disparado este año a máximos históricos, pero el emirato no tiene suministros disponibles para apoyar al mercado.
“Estamos al máximo, en la medida en que les hemos dado a todos nuestros clientes las cantidades debidas”, declaró el ministro de Energía de Qatar, Saad al-Kaabi. “No estoy contento con los altos precios de la gasolina”.
En todo el mundo, los precios están presionando a los gobiernos y a la industria.
Las siderúrgicas en Gran Bretaña dijeron que podrían tener que cerrar la producción y enfrentarían graves consecuencias a menos que el gobierno ayude.
Londres dijo el domingo que estaba trabajando en cómo brindar apoyo a las industrias de uso intensivo de energía, pero se negó a decir qué acción se estaba considerando.
En China, la segunda economía más grande del mundo y el principal exportador, el gobierno ha tratado de impulsar el suministro de carbón, pero la mayor economía provincial en el noreste de China dijo el lunes que estaba lidiando con un empeoramiento de la escasez de energía.
Los déficits enviaron los futuros de energía y petroquímicos chinos a máximos históricos y plurianuales el lunes.
La demanda del procesamiento de datos se sumó a la tensión.
La Asociación Holandesa de Data Centers ha pedido a los líderes políticos que limiten los precios de la electricidad, proporcionen exenciones fiscales corporativas o introduzcan subsidios en apoyo de las empresas que invierten en energía más limpia.