El escándalo que desató la publicación de una foto del primer ministro canadiense Justin Trudeau en un anuario escolar donde aparece con la cara pintada de marrón en una fiesta de disfraces en el 2001 está llamando la atención sobre una práctica que, según los académicos, la gente ha realizado durante año para degradar a las personas de minorías étnicas.
En la foto, Trudeau, entonces de 29 años, aparece en una fiesta “árabe” disfrazado con un turbante y túnica, con un maquillaje marrón en la cara, manos y cuello. Al igual que los gobernadores estadounidenses de Virginia y Alabama que se han disculpado por maquillarse la cara de negro años antes de entrar a la política, Trudeau, quien también se ha disculpado, está enfrentando la crisis política de su carrera.
Cuando los miembros de una población dominante oscurecen el color de su piel con maquillaje, esto refuerza los estereotipos raciales y denigra a los indígenas estadounidenses, hispanos, afroestadounidenses y otras personas de minorías étnicas en base al color de su piel y rasgos físicos exagerados, dicen los sociólogos.
Este es un vistazo a cómo la gente blanca se ha oscurecido la piel con maquillaje a través de la historia y hasta hace poco para representar o ridiculizar a personas de minorías étnicas:
En arte
Las obras de William Shakespeare incluyen a varios personajes de minorías étnicas, pero desde el principio y hasta la era moderna los intérpretes eran actores blancos. Esos actores se maquillaban la cara de negro o marrón para interpretar al protagonista, un moro, en “Otelo”, y de color oscuro para interpretar al indígena Caliban en “La tempestad”.
En Estados Unidos en el siglo XIX, el actor Thomas Dartmouth Rice popularizó espectáculos de trovador oscureciéndose la cara con maquillaje y adoptando lo que él pensaba era el habla coloquial de los afroestadounidenses. Otros actores imitaron a Rice y también se oscurecieron el rostro y usaron estereotipos de afroestadounidenses para crear una de las formas más populares de arte en la historia del país pese a protestas de intelectuales y activistas blancos. La cara oscurecida con maquillaje influiría la manera cómo la gente representaría a otros grupos étnicos en Estados Unidos.
Hollywood seguiría permitiendo que los actores blancos usen maquillaje racista para interpretar personajes negros, latinos y asiáticos hasta el siglo 20 en vez de usar actores de esas minorías étnicas. En 1951, en una adaptación de “Otelo”, el actor y director Orson Welles, quien era blanco, se maquilló el rostro de color bronce para interpretar a Othello. Charlton Heston se maquilló la cara de marrón para interpretar al agente del orden mexicano Ramón Vargas en la cinta “Touch of Evil”, de 1958.
En los medios
En el 2012, un anuncio publicitario de Popchips en el que aparecía Ashton Kutcher con la cara maquillada de marrón y hablando con un exagerado acento indio fue retirado tras quejas de indígenas estadounidenses. Pero las caras pintadas de color marrón y negro no son algo exclusivo de Estados Unidos sino que han aparecido en medios de todo el mundo.
En el 2017, el productor de un documental británico sobre musulmanes fue criticado por hacer que una mujer blanca se maquillara la cara de marrón para empaparse completamente en la vida de una familia paquistaní musulmana en Manchester, Inglaterra. En el documental “My Week as a Muslim”, Katie Freeman se maquilló la cara de color oscuro, salió con dientes postizos y usó lentes de contacto color café.
Este año, la aerolínea italiana Alitalia retiró un anuncio publicitario sobre sus vuelos a Washington, D.C. en el que un actor con la cara maquillada de negro interpretaba al presidente Barack Obama.
En Singapur, un reciente anuncio publicitario sobre un pago electrónico en el que salía un comediante chino con el rostro maquillado de café desató críticas entre algunos indios y malayos. La empresa y la agencia creativa se disculparon.
En comedia
Una de las principales televisoras de Perú fue multada con 26.000 dólares en 2013 por sacar al aire al popular personaje cómico Negro Mama en un programa de entretenimiento. El personaje era interpretado por Jorge Benavides, quien aparecía con la cara maquillada de negro, labios gordos y nariz ancha.
Este año, una personalidad televisiva de la cadena mexicana Televisa fue criticada fuertemente por salir arreglada con la cara pintada de marrón y una nariz postiza para burlarse de la actriz indígena Yalitza Aparicio. Televisa luego borró un tuit con un video de la personalidad televisiva con la cara maquillada de marrón imitando a la actriz mexicana, quien fue a la entrega de premios Oscar donde estaba nominada como mejor actriz.
En agosto, The New York Times reportó que un canal privado en Libia fue criticado este año por trasmitir un sketch en el que una actriz con el rostro oscurecido con maquillaje pide a unas personas en un elevador que vean a sus hijos y cuando las personas retiran el cobertor de la carriola, unos monos salen brincando. Activistas dijeron que el sketch fue un ejemplo de los estereotipos racistas que se ven regularmente en comedias árabes.
En deportes, otros eventos
Cada año hay confrontaciones en Holanda por el asistente de la versión holandesa de Papá Noel. Conocido como Black Pete (el Negro Pedro), el personaje es interpretado por gente blanca con el rostro oscurecido con maquillaje y es común verlo en eventos infantiles. Las tensiones ocurren mientras los niños holandeses aguardan la llegada de su Papá Noel, que viene acompañado de Black Pete. La gente blanca generalmente se maquilla la cara de negro cuando se disfraza del personaje. Oponentes de la tradición dicen que recrear a Black Pete cada año promueve estereotipos racistas.
A través de la historia estadounidense, la gente blanca se ha maquillado la cara de rojo, usado cerquillo y plumas, y hablado inglés entrecortadamente para interpretar o “jugar” a ser indígenas estadounidenses. Pero casi cada semana durante la temporada de fútbol estadounidense hay aficionados que se pintan de color rojo en honor de equipos como los Redskins de Washington. Activistas indígenas estadounidenses han respondido con protestas y la campaña #notyourmascot (#nosoytumascota) en las redes sociales.
En el 2014, el entonces rector de la Universidad de Louisville, James Ramsey, se disculpó luego que el Courier-Journal publicó una foto suya al lado de empleados del centro superior luciendo bigotes falsos, velos de mantilla y sombreros. No quedó claro si la foto estaba relacionada con la celebración anual del Mes de la Herencia Hispana que se realiza en el campus.