El jefe del Parlamento, , reconocido como presidente interino de por más de 50 países, dijo el sábado que el gobierno de ordenó la reapertura de pasos fronterizos con debido a la presión de los ciudadanos.

Por la "presión de los ciudadanos (porque) hay una necesidad latente en todo el país", dijo Guaidó ante periodistas al ser consultado sobre la medida que el chavismo dio a conocer ayer y que entró en vigencia hoy, cuando se reactivó el paso peatonal entre el estado venezolano de Táchira y el colombiano Norte de Santander.

Guaidó recordó que conforme se acentuaba la crisis económica en el país más venezolanos comenzaron a atravesar esa frontera diariamente para buscar alimentos y medicinas que escasean en Venezuela o para emigrar.

A "esa frontera que pueden trasladarse a buscar alimentos, buscar medicinas (...) a diferencia de aquí en Caracas y de toda Venezuela donde no hay nada por la corrupción", subrayó.

El líder del Parlamento recorrió este sábado barriadas pobres del estado Miranda, cercano a Caracas, junto al excandidato presidencial Henrique Capriles.

Al término de esas caminatas ofreció un discurso frente a decenas de simpatizantes en el que acusó a Maduro, al que considera un dictador, de los "siete millones de venezolanos que están hoy al borde de la muerte", en alusión a esa cantidad de personas que según Naciones Unidas (ONU) necesita asistencia humanitaria.

Por otra parte, al ser consultado sobre la posibilidad de un nuevo encuentro en Noruega con representantes de la llamada revolución bolivariana para avanzar en la construcción de un diálogo político reiteró que estas conversaciones se reanudarán en la medida en que sea posible la salida de Maduro del poder.

"Cuando haya un nuevo encuentro en Oslo, es porque estaremos más cerca del cese de la usurpación, del gobierno de transición y elecciones libres. Cuando estemos listos para dar un paso en esa dirección y que el régimen lo esté, bueno, habrá un nuevo encuentro", comentó.

Venezuela atraviesa una escalada de tensión política desde enero pasado, cuando Maduro juró un nuevo mandato de seis años tras ganar unas elecciones que fueron tachadas de fraudulentas por la oposición y que no son reconocidas por buena parte de la comunidad internacional.

En respuesta, Guaidó se proclamó presidente interino arguyendo la Constitución venezolana y ha sido reconocido por más de 50 países, con a la cabeza.