Personal de salud y personas atrapadas dentro del hospital más grande de Gaza, rechazaron las versiones de que los israelíes está ayudando a evacuar a bebés, mujeres y ancianos. Por el contrario, mencionaron que los combates continúan justo afuera de las instalaciones donde las incubadoras permanecen inactivas ante la falta de electricidad.
Sumado a todo esto, informaron que la preocupación crece cada momento porque los suministros cruciales como agua, alimentos y medicinas se está escaseando por la cantidad de heridos que llegan hasta este lugar.
De acuerdo a información del Ministerio de Salud de Gaza, gobernado por Hamás, se conoció que el último generador de electricidad del hospital se quedó sin combustible, provocando la muerte de tres bebés prematuros y otros cuatro pacientes. Además, hay otros 36 recién nacidos que están en riesgo debido a la falta de electricidad.
“Lamentablemente, todavía no se han llevado el combustible”, dijo el portavoz, el teniente coronel Richard Hecht. Agregó que si este combustible no funciona, buscarán “otras soluciones para los bebés”.
Un portavoz del Ministerio de Salud, Ashraf al-Qidra, dijo a Al Jazeera que “alguien contactó al director y le dijo que tenían 200 litros de combustible. Estos 200 litros dan menos de una hora para hacer funcionar el generador. Esto es una burla hacia los pacientes y los niños”.
No hay apoyo
El ejército israelí aseguró que sus tropas ayudarían a trasladar a los bebés el domingo y que estaban en contacto con el personal de Shifa para la pronta atención de los recién nacidos, pero todo quedó en solo palabras.
Medical Aid for Palestinians, una organización benéfica con sede en el Reino Unido que ayudó a la unidad de cuidados intensivos neonatales del hospital durante años, cuestionó la afirmación de los militares de Israel.
“El traslado de recién nacidos gravemente enfermos es un proceso complejo y técnico”, dijo la directora ejecutiva, Melanie Ward, en un comunicado. “Dado que las ambulancias no pueden llegar al hospital... y ningún hospital cuenta con la capacidad para recibirlas, no hay indicación de cómo puede hacerse esto de forma segura”.
La única opción segura es que Israel detenga su ataque y permita que el combustible llegue al hospital, aseveró la especialista.
Por su parte, el Ministerio de Salud informó que aún existen 1.500 pacientes en Shifa, así como 1.500 trabajadores de salud y entre 15.000 y 20.000 personas que buscaban cobijo.
Situación extremadamente grave
Muhammed Zaqout, director de hospitales en Gaza, dijo que el Ministerio de Salud no ha podido actualizar el número de muertos desde el viernes porque los médicos no pueden llegar a las zonas afectadas por los bombardeos israelíes.
“La situación es extremadamente grave”, afirmó. “Las ambulancias no pueden llegar hasta las personas que se encuentran bajo los escombros”.