La administración de Joe Biden dio a conocer un compromiso financiero de US$ 20,000 millones destinados a respaldar proyectos enfocados en energías renovables y la mitigación del cambio climático. Esta iniciativa tiene como objetivo principal beneficiar a comunidades en situación de vulnerabilidad. La EPA, agencia de protección ambiental de Estados Unidos, junto con la vicepresidenta Kamala Harris, fue la encargada de anunciar estos subsidios.
Apuntan a movilizar capitales privados para apoyar “decenas de miles de proyectos” vinculados a la reducción de la contaminación, costos energéticos y a la promoción de las energías limpias.
LEA TAMBIÉN: Mayor número de lobos en Europa amenaza la agenda ambiental
Estos US$ 20,000 millones funcionarían como apalancamiento para levantar más financiamiento, en una proporción de US$ 7 de capital privado por US$ 1 de fondos públicos, precisó el comunicado de la EPA.
Alrededor de 70% del total debería ir a comunidades desfavorecidas, remarcó Harris.
Los proyectos financiados van desde paneles solares en un restaurante de Detroit a la instalación de bombas de calor en viviendas precarias.
LEA TAMBIÉN: Captura del CO₂: avances y desafíos en la lucha contra el cambio climático