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La armada ecuatoriana desplegó barcos, lanchas y submarinos para vigilar que una imponente flota pesquera china no supere los límites marítimos de las islas Galápagos, un patrimonio natural de la humanidad.
El comandante de la armada, Darwin Jarrín, señaló que “es una flota depredadora de los mares” integrada por 245 unidades entre barcos pesqueros, factorías y buques de abastecimiento, que se mueve en las proximidades del archipiélago por tercer año consecutivo y que se dedican a prácticas de pesca no reglamentada.
Añadió que es necesario conformar un frente común contra las actividades de tales flotas, y que la situación debe ser tratada en la próxima reunión de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar.
El 2017 fue el primer año en que apareció la flota china con 297 buques en aguas cercanas a las islas Galápagos, el siguiente año se incrementó a 300 buques en operaciones de pesca.
En agosto del 2017, la embarcación Fu Yuan Yu Leng 999 fue detenida cuando navegaba con pesca ilegal dentro de la reserva marina de Galápagos. El barco fue decomisado y rematado y sus tripulantes fueron sentenciados y siguen detenidos en Ecuador.
La UNESCO declaró en 1979 Patrimonio de la Humanidad a ese archipiélago ubicado en medio del océano Pacífico y a 1,000 kilómetros de las costas de Ecuador en atención a sus especies animales y vegetales, terrestres y marinas, únicas en el mundo, que sirvieron de base para que el científico inglés Charles Darwin elaborara su teoría de la evolución de las especies.
