Varios miles de cocaleros de la región de Yungas de Bolivia, opositores al gobierno, tomaron este lunes el control de un mercado que comercializa coca en La Paz, tras violentos choques callejeros con la policía que dejaron varios heridos, constató la AFP.
Al grito de “¡los Yungas unidos, jamás serán vencidos!” y de “¡sí se pudo! ¡sí se pudo!”, los labriegos ingresaron portando la bandera nacional roja, amarilla y verde, al mercado que comercializa coca de manera legal, en el barrio de Villa Fátima, puerta de ingreso a los valles subandinos de Yungas, donde se siembra coca desde antes del imperio incaico.
Los incidentes comenzaron a mediodía, cuando los campesinos se organizaron para tomar el control del mercado de la Asociación de Productores de Hoja de Coca de La Paz (Adepcoca), tras quejarse que otro grupo, apoyado por el gobierno del presidente Luis Arce, ocupó la dirección, en medio de diferencias políticas y económicas en el control del mercado legal de coca.
Decenas de policías antimotines que resguardaban el lugar desde hacía una semana hicieron un uso profuso de gases lacrimógenos, pero debieron retroceder varias cuadras ante la presión masiva de los campesinos.
Los labriegos lanzaron piedras, palos y petardos mientras quemaban llantas y colchones. Los enfrentamientos dejaron al menos dos policías y dos campesinos heridos, constató la AFP.
Los uniformados dejaron desprotegido el mercado de Adepcoca, lo que permitió el ingreso de los campesinos.
Un cocalero señaló enfervorizado: “¡estamos muy contentos, muy felices por este logro en nuestra sede, que estaba secuestrada por el gobierno!”.
Otro afirmó: “¡esta es nuestra casa, es la casa de los cocaleros!”.
Un autodenominado comité de emergencia, que comandó la toma del mercado, anticipó que a la brevedad se conformará un comité electoral para que organice elecciones para una nueva dirección de Adecopa.