Los ministros de Asuntos Exteriores y de Defensa de la Unión Europea acordaron el lunes una estrategia de seguridad destinada a aumentar el peso militar del bloque por si hay una nueva guerra en Europa, estableciendo una fuerza de reacción rápida con hasta 5,000 efectivos que se desplegarán en caso de crisis.
“Las amenazas aumentan y el costo de la inacción es evidente”, dijo el responsable de la política exterior de la UE, Josep Borrell, quien calificó de “guía para la acción” el documento que establece las ambiciones europeas en materia de defensa y seguridad que deben alcanzarse en el 2030.
Los trabajos sobre la estrategia comenzaron en el 2020, antes de la pandemia, la caótica retirada de Afganistán y la guerra de Ucrania. Tras el inicio de la invasión rusa, el 24 de febrero, la UE endureció su lenguaje hacia Moscú.
“La UE tiene que ser capaz de proteger a sus ciudadanos y contribuir a la paz y la seguridad internacionales”, dijo el bloque en un comunicado. “Esto es aún más importante en un momento en el que la guerra ha vuelto a Europa, tras la agresión rusa injustificada y no provocada contra Ucrania, así como de grandes cambios geopolíticos”.
Rusia ha descrito su invasión como una “operación militar especial” para desarmar a Ucrania.
La UE ha dejado claro que considera sus esfuerzos complementarios a los de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y que no pretende competir con la alianza militar liderada por Estados Unidos como ancla de la defensa occidental.
Alemania está dispuesta a proporcionar el núcleo de la nueva fuerza de reacción rápida de la UE en el 2025, año en que se prevé que esté plenamente operativa, dijo en Bruselas la ministra de Defensa, Christine Lambrecht.
La fuerza sustituirá a los actuales grupos de combate de la UE que el bloque tiene desde el 2007, pero que nunca ha utilizado. Los planes de revisión cobraron fuerza después de que los países europeos tuvieron problemas para gestionar la caótica retirada de Kabul en agosto.
Se espera que los líderes de la UE aprueben los lineamientos de seguridad, denominada Brújula Estratégica, en una cumbre que se celebrará el jueves y el viernes en Bruselas.