La flota lechera, un servicio de entrega a domicilio que evolucionó de carruajes tirados por caballos a los primeros vehículos eléctricos, es algo del pasado. ¿Seguro?
Una compañía de comestibles por internet poco conocida con sede en Ámsterdam ha revivido el concepto, pero con un toque moderno.
Picnic BV tiene un concepto denominado “Milkman 2.0” para entregar comestibles utilizando vehículos eléctricos, centrándose en un menor desperdicio de los alimentos y menos kilómetros recorridos. La compañía compra y hace entregas locales, con sus camionetas que no van a más de 50 kilómetros por hora.
“Nuestro objetivo es crear una infraestructura sostenible para la entrega de alimentos”, dijo Joris Beckers, cofundador de la compañía, de 53 años de edad, en una entrevista telefónica.
Fundada en 2015, Picnic ha puesto en circulación una flota de 1,000 camionetas eléctricas en las calles de los Países Bajos y Alemania y planea agregar “cientos más” para finales del 2020. La compañía dice que el vehículo de entrega que ha diseñado y producido es totalmente eléctrico y “no tiene emisiones de partículas pequeñas y evita el tráfico debido a su reducido diseño”.
Respaldada por inversores que incluyen el brazo de inversión de la familia empresarial Fentener van Vlissingen, la compañía recaudó 250 millones de euros (US$ 278 millones) en una nueva ronda de financiación en noviembre.
Otros patrocinadores incluyen De Hoge Dennen Capital, De Rijke family & Hoyberg, el brazo de inversión de la familia Hoyer, que es accionista de Heineken NV.
“Somos de alto crecimiento, de alto riesgo, pero a largo plazo”, dijo Beckers.
La compañía utilizará el efectivo para continuar su crecimiento y construir un “centro de procesamiento robotizado” para comestibles en línea en Utrecht, Holanda. El centro tendrá como objetivo procesar alrededor de 150,000 pedidos a la semana, dice.
Infraestructura de construcción
El mercado de entrega de comestibles es altamente competitivo, y el concepto de Picnic no es completamente original. En el Reino Unido, Ocado es uno de los supermercados digitales, sin tiendas físicas, que entregan desde sus almacenes. En Alemania está Bringmeister.
Picnic dice que tiene una participación de mercado del 5% en las ciudades activas en las que tiene un negocio más desarrollado. El mercado de comestibles en los Países Bajos totaliza 40,000 millones de euros y en Alemania es de 175,000 millones de euros, según la compañía.
El año pasado fue un récord para Picnic, que agregó casi 300,000 nuevos clientes en los Países Bajos y Alemania. Los ingresos anuales de Picnic actualmente son de unos 300 millones de euros, pero la compañía tiene la mirada puesta en objetivos mayores.
Licenciado en Derecho y entusiasta del ciclismo, Beckers, quien dijo en una conferencia de Shop Talk Europe en el 2017 que “tropezó con el mundo de Internet alrededor de 1999, cuando Amazon todavía era una pequeña librería”, no quiere que Picnic se limite a los comestibles.
“La comida es nuestro punto de entrada, pero estamos construyendo una infraestructura de comercio electrónico”, dijo.
Por ejemplo, la compañía está operando una serie de proyectos piloto con minoristas de moda que incluyen Zalando SE para permitir que los clientes envíen sus devoluciones a través de Picnic.
“Estamos trastornando y mejorando significativamente la experiencia del comercio electrónico”, dijo Beckers.