La escasez de mano de obra por las infecciones por COVID-19, al cuidado de menores y el hartazgo de empleados mal pagados y decididos a no retomar sus empleos en las mismas condiciones que antes de la crisis sanitaria, ha presionado a la empresas a garantizar una remuneración mínima mejorada con ventajas como un seguro médico y primas. (Foto: AFP)
La escasez de mano de obra por las infecciones por COVID-19, al cuidado de menores y el hartazgo de empleados mal pagados y decididos a no retomar sus empleos en las mismas condiciones que antes de la crisis sanitaria, ha presionado a la empresas a garantizar una remuneración mínima mejorada con ventajas como un seguro médico y primas. (Foto: AFP)

Para los empleados de restaurantes de comida rápida en Manhattan exigir un salario de US$ 20, una reivindicación impensable antes de la pandemia que se ha convertido en algo normal que las empresas han aumentado sus salarios de forma notable, una tendencia que sin embargo no ha reducido las desigualdades.

La escasez de mano de obra por las infecciones por COVID-19, al cuidado de menores y el hartazgo de empleados mal pagados y decididos a no retomar sus empleos en las mismas condiciones que antes de la crisis sanitaria, ha presionado a la empresas a garantizar una remuneración mínima mejorada con ventajas como un seguro médico y primas.

“Ha habido una toma de conciencia de parte de los grandes empleadores del país de la necesidad de renivelar los salarios si quieren atraer mano de obra fiable que les ayude a navegar en este periodo de incertidumbre”, destacó Gregory Daco, jefe economista en Ernst & Young Parthenon.

“Apoyar y retener a los mejores colaboradores en el mundo nos permite ofrecer los mejores productos y los servicios más innovadores a nuestros clientes”, dijo por su parte la compañía Apple tras anunciar un salario mínimo por hora de US$ 22.

El gigante de la tecnología asegura ser el líder del sector en cuanto a la remuneración mínima por hora y se jacta de haber ampliado “una sólida gama de ventajas sociales” para sus empleados. Además, aumentando los salarios, la empresa puede, al igual que Amazon, tratar de desmotivar ambiciones sindicales.

La paga horaria de US$ 22 presenta un alza del 45% en comparación con su nivel más bajo del 2018, precisó el grupo.

Fidelizar a los trabajadores

En el verano del 2021, ante la escasez de mano de obra, varias empresas, entre ellas Amazon, Target o Chipotle habían superado el umbral de US$ 15 la hora, es decir más del doble del salario mínimo federal (US$ 7.25), que no ha cambiado desde el 2009.

Esta semana Bank of America, anunció también una remuneración mínima de US$ 22 que irá hasta US$ 25 de aquí al 2025.

En Estados Unidos los aumentos de salarios más altas fueron para los empleados menos acomodados que no dudaron en manifestarse para obtener un alza.

Todos los niveles salariales aumentaron pero son los rangos más bajos los que obtuvieron una mejora suficiente para compensar la inflación, según Mahir Rasheed, economista en Oxford economics.

Ilusión óptica

Pero si estas alzas parecen significativas en especial en la hotelería y la restauración, siguen siendo inferiores al salario medio durante el año.

“Las alzas parecen enormes, pues algunos salarios pasaron de US$ 7 a US$ 10, de US$ 10 a US$ 12, de US$ 12 a US$ 15 e incluso de US$ 15 a US$ 20″, dice Gregory Daco.

Sin embargo, “US$ 15 por hora, es US$ 30,000 por año, es decir mucho menos que los US$ 50,000 a US$ 60,0000 del salario promedio”, detalló el experto.

Además, esta aparente remontada podría darse una sola vez.

Es “poco probable” que las alzas continúen a ese ritmo, incluso si vemos nuevos aumentos aquí y allá, las empresas quieren seguir siendo atractivas, estima Mahir Rasheed.

Esas ganancias van a reducirse a medida que los trabajadores se reintegren al mercado, explica Rasheed.

En tanto que la necesidad de los empleadores por mano de obra se ralentiza, “el poder de negociación de los trabajadores va a erosionarse”, apunta Gregory Daco.

“Desafortunadamente no espero que esas alzas se sostengan en el largo plazo porque no hemos visto un aumento del salario mínimo federal”, reconoce Elise Gould, economista del Instituto de Política Económica (EPI), un centro de pensamiento de Estados Unidos.

En un estudio publicado el mes pasado, Gould destacaba que el salario medio había aumentado un 4.4% en el primer año de pandemia en Estados Unidos pero cayó un 1.7% en el segundo año.

“Incluso con un crecimiento más rápido de los sueldos de los trabajadores menos remunerados a lo largo del último año, los niveles salariales permanecen muy desiguales en el mercado de trabajo estadounidense”, con disparidades de acuerdo al género y la raza.