Una muestra de bancos estadounidenses dice que esperan que la demanda de crédito por parte de las empresas objetivo del programa de préstamos Main Street de la Reserva Federal (Fed) aumente en los próximos meses, pero no dio señales claras de que el uso en sí mismo del muy criticado esquema vaya a cambiar.
Por el contrario, los que respondieron a un sondeo de la Fed a los encargados de préstamos de alto nivel apuntó que los créditos bajo el programa Main Street representaron menos del 2.5% de los préstamos comerciales que hicieron.
Los prestamistas citaron una variedad de restricciones en torno al uso del programa, incluyendo los requerimientos de flujo de efectivo impuestos por el banco central y los términos de pago que descartaban a algunos posible prestatarios, además de la capacidad de simplemente otorgar ellos mismos los préstamos sin involucrarse con la Fed.
“Los que respondieron esperaban que las consultas de préstamos (comerciales e industriales) aumentaran en los próximos tres meses”, de compañías en la categoría de tamaño elegibles para los programas de Main Street, o con no más de 15,000 empleados o US$ 5,000 millones en ingresos.
“Sin embargo, solo una parte modesta de los bancos esperaba que su disposición a otorgar préstamos (de Main Street) aumentara durante el mismo período”.
El último sondeo de agosto cubrió 86 bancos, incluidos 33 con activos de al menos US$ 50,000 millones.
Main Street es una piedra angular de la respuesta de la Fed a la pandemia. Pero la aceptación ha sido baja, un hecho que las autoridades del banco central resaltan como evidencia de que el sistema crediticio funciona sin el apoyo del organismo. Hasta ahora, la Fed ha aprobado solo unos US$ 2,000 millones de posibles US$ 600,000 millones en préstamos.