La sintonía entre el británico Boris Johnson y el estadounidense Donald Trump amenaza con dejar tocada la “relación especial” entre ambos países si el demócrata Joe Biden gana las elecciones la próxima semana, en un momento en que Londres necesita amigos más que nunca.
El Reino Unido se separará de la Unión Europea (UE) a finales de año y para compensar la pérdida de su principal socio comercial busca cerrar acuerdos de libre comercio con terceros países. El principalmente de ellos es Estados Unidos, con quien negocia ya desde hace tiempo.
Pero los demócratas ya advirtieron de que dicho tratado se vería en peligro si la aplicación del Brexit por los británicos debilita la paz en Irlanda del Norte, firmada en 1998 al término de tres décadas de sangriento enfrentamiento, con la mediación de Estados Unidos entre otros.
“No creo que Joe Biden se sienta particularmente efusivo con este gobierno británico, y van a tener que trabajar muy duro para cambiar eso”, dijo el domingo a CNN el exministro británico de Finanzas conservador George Osborne.
El pasado diciembre, cuando Johnson se encaminaba a una aplastante victoria en las legislativas, Biden lo describió como un “clon físico y emocional” de Trump.
Incluso el presidente estadounidense ha elogiado al primer ministro británico como “el Trump de Gran Bretaña”.
Y la larga lista de comentarios provocativos del popularmente conocido como “BoJo” ha vuelto para pasarle factura: Biden era vicepresidente cuando en el 2016 Johnson escribió que Barack Obama era antibritánico por su herencia “parcialmente keniana” y a su “antipatía ancestral por el Imperio Británico”.
Populistas “camaleones”
Si Biden gana las presidenciales, es probable que muchos exmiembros de la administración Obama vuelvan a la Casa Blanca, con una baja imagen de Johnson.
Uno de ellos, Ben Rhodes, exasesor de seguridad nacional, comparó recientemente en Tweeter al británico con un Trump de “mejor cabello” y mayor coeficiente intelectual.
En opinión de Heather Conley, experta del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington, si Biden es elegido el primer ministro británico puede adaptarse rápidamente.
“Me consuela que los populistas sean camaleones: adoptan el color del momento político. Confío en que si Biden gana, el tono de Johnson cambie drásticamente”, dijo.
Trump recibió con agrado la llegada a Downing Street el año pasado del “duro” e “inteligente” inglés nacido en Nueva York. Johnson, por su parte, ha alabado las “muchas buenas cualidades” de Trump, en contraste con la desconfianza de otros líderes como la canciller alemana Angela Merkel.
Pero en cuestiones como el cambio climático, Irán, Rusia o la OTAN, el Reino Unido sigue más alineada con sus socios europeos. Y con el propio Biden.
“Mejor con Biden”
Según Conley “los asuntos relacionados con el Brexit serían tratados de manera muy diferente en una administración Biden respecto al entusiasmo probrexit de la administración Trump”.
La negociación comercial entre ambos países atrae la atención de los demócratas desde que Johnson introdujo en septiembre una legislación que revocaría unilateralmente lo dispuesto en el acuerdo de Brexit sobre el futuro comercio entre la provincia británica de Irlanda del Norte y la vecina República de Irlanda, miembro de la UE.
Biden, que habla apasionadamente de sus raíces irlandesas, advirtió que el acuerdo comercial no vería la luz si Londres socava el acuerdo de paz del Viernes Santo de 1998, que puso fin al enfrentamiento entre católicos republicanos y unionistas protestantes.
El gobierno británico no quiere tomar partido público en las elecciones estadounidenses del 3 de noviembre. Pero algunos conservadores no muestran tal reserva.
Sajid Javid, exministro de Finanzas de Johnson, escribió en el Daily Telegraph la semana pasada sobre el discurso final de Ronald Reagan en la convención republicana de 1992, año en que el británico trabajaba como banquero en Nueva York.
Según Javid, Reagan apelaba a “las mejores esperanzas, no a los peores temores”. Ahora, “sólo uno de los candidatos puede decir lo mismo de forma creíble. El Reino Unido estaría mejor con Biden”, concluía.