Los dos candidatos a la Casa Blanca para las elecciones de noviembre han dejado esta semana claro a los votantes y los empresarios su mensaje económico para el país, respondiendo así a lo que las encuestas identifican como una de las principales preocupaciones de los estadounidenses.
Este jueves, el republicano Donald Trump se subió al escenario del Economic Club de Nueva York para hablar a empresarios e inversores sobre su plan financiero para el país. Mientras que la vicepresidenta estadounidense y candidata demócrata a la Casa Blanca, Kamala Harris, se acercó el miércoles a las pequeñas empresas con promesas de nuevas exenciones fiscales.
En Nueva York, el expresidente no dudó en criticar la visión económica de su contrincante, a la que acusó de marxista, y del actual presidente, Joe Biden, al señalar que los demócratas derrochan el dinero de los ciudadanos a medida que sube la inflación.
LEA TAMBIÉN: Kamala Harris vs Donald Trump: las reglas del debate del martes 10 de septiembre
LEA TAMBIÉN: PPK opina sobre la coyuntura electoral y fiscal en Estados Unidos
“Kamala Harris sacará más dinero de los bolsillos estadounidenses. Mi plan dejará a la familia típica con muchos miles de dólares más de los que tiene ahora”, aseguró el magnate desde la Gran Manzana.
Durante su discurso, Trump dijo que creará una comisión de eficiencia gubernamental, adoptando así una idea política que le presentó el empresario Elon Musk, y prometió eliminar 10 regulaciones gubernamentales existentes por cada nueva regulación que se añada bajo su posible nueva administración.
Impuestos y aranceles
Trump volvió a repetir que está a favor de reducir los impuestos y aumentar los aranceles a las importaciones.
En este sentido, el exmandatario prometió reducir la tasa impositiva corporativa del 21% al 15% -en su primera mandato ya la redujo del 35 al 21%-, pero solo “para las empresas que fabrican sus productos en Estados Unidos”. Y prometió ampliar los aranceles a los productos importados del extranjero.
“Si (una empresa) subcontrata o reemplaza a trabajadores estadounidenses, no tiene derecho a ninguno de estos beneficios. De hecho, pagará un arancel muy alto. Un producto que viene de otro país, que se fabrica en otro país, y que llega a Estados Unidos, tendrá un arancel alto”, anotó Trump.
En cuanto a Harris, ha propuesto aumentar el impuesto a sociedades al 28 %: “Si usted gana un millón de dólares al año o más, la tasa impositiva sobre sus ganancias de capital a largo plazo será del 28% según mi plan, porque sabemos que cuando el Gobierno fomenta la inversión, conduce a un crecimiento económico de base amplia”, dijo ayer Harris en Nuevo Hampshire.
La vicepresidenta prometió a pequeñas empresas nuevas exenciones fiscales que incluyen elevar de US$ 5,000 a US$ 50,000 las deducciones a las que se pueden acoger quienes empiezan un emprendimiento.
Los pequeños negocios, según dijo, están construyendo un futuro mejor para sus empleados y para sus comunidades y, por ende, están erigiendo “una clase media más fuerte y un Estados Unidos más fuerte para todos”.
La encuesta más reciente del Wall Street Journal muestra que Trump tiene una ventaja de 8 puntos sobre Harris cuando se pregunta a los votantes quién manejaría mejor la economía, y una ventaja de 5 puntos en lo referente al manejo de la inflación. Pero esas ventajas se han reducido con respecto a lo que se observaba cuando el presidente Biden estaba en la carrera.
El próximo martes, Harris y Trump se verán las caras por primera vez en Filadelfia en su primer debate presidencial, que será presentado por ABC News.
La cadena anunció el miércoles las reglas que acordaron las campañas, que, como en el debate de Trump con el presidente Biden, incluyen que no haya público en vivo y que el micrófono esté silenciado cuando el otro candidato esté hablando.