El fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, anunció que se fijaba el objetivo de contribuir a la inscripción de cuatro millones de estadounidenses suplementarios en las listas electorales, de cara a los comicios presidenciales de noviembre.
“Anunciamos el miércoles la mayor campaña de información electoral de la historia estadounidense. Nuestro objetivo es ayudar a cuatro millones de personas a inscribirse” en los registros oficiales, dijo en una columna publicada por el diario USA Today.
La red social prevé ofrecer a sus usuarios un “nuevo centro de información electoral arriba del hilo de las actualizaciones de Facebook e Instagram con el fin de que todo el mundo pueda verlo”, explicó.
“Globalmente, prevemos que más de 160 millones de personas en Estados Unidos vean en Facebook entre julio y noviembre informaciones procedentes de fuentes fiables sobre el procedimiento para votar en las elecciones”, estimó.
La inscripción en las listas electorales es un tema crucial en las presidenciales en Estados Unidos ya que los miembros de algunas comunidades desfavorecidas tienen dificultades o reticencia a ver su nombre en las listas.
Zuckerberg también subrayó su interés en hacer frente a la desinformación y en ese sentido ha confirmado que bloqueará toda la publicidad de medios extranjeros en las redes durante este período.
A partir del 24 de junio los usuarios de la red dispondrán de una nueva función que brinda la posibilidad de dejar de ver anuncios políticos.
“En el 2016 fuimos lentos para identificar las interferencias extranjeras en nuestra plataforma”, admitió. “La amenaza de una injerencia electoral es real y sigue siendo de actualidad, pero nuestros sistemas están más preparados que nunca. Hemos desmantelado más de 50 redes de cuentas falsas en el 2019 y hemos suprimido 18 este año”, agregó.
En una columna publicada en el periódico británico Daily Telegraph, el jefe de asuntos públicos de la red, Nick Clegg, también confirmó que el grupo, acusado de hacer la vista gorda ante la injerencia extranjera en la campaña presidencial del 2016 que llevó a Trump al poder, tenía la intención de bloquear la publicidad “de las organizaciones de medios controladas por un estado en otros países”.
Facebook ya había anunciado el 4 de junio que analizaba la prohibición en las redes estadounidenses de esas publicidades a cargo de medios controlados financiera y editorialmente por un Estado.
Clegg sostuvo que entre marzo y mayo pasados, Facebook impidió que se transmitieran “más de 750,000 anuncios políticos dirigidos a Estados Unidos porque el anunciante no había completado el proceso de autorización”.
Indicó al respecto que el grupo ahora tenía más de 35,000 personas trabajando en temas de seguridad, tres veces más que hace cuatro años.