El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, no reconoció la legitimidad del nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, nombrado por el chavista Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), al considerar que está “alineado con el régimen” de Nicolás Maduro.
“El régimen ha seleccionado un CNE que simplemente aprobará sus decisiones e ignorará las condiciones requeridas para las elecciones libres”, manifestó Pompeo en un comunicado.
A su juicio, “este paso del régimen y de su Tribunal Supremo lleva a Venezuela aún más lejos de una transición democrática”.
La condena de Estados Unidos llega después de que el líder opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por más de medio centenar de países, pidiera aumentar la presión internacional sobre Maduro después de la designación el viernes de los nuevos rectores del CNE.
Guaidó, sin embargo, no especificó a qué se refería con sus peticiones de aumentar la presión internacional.
Una de las formas que Estados Unidos ha usado para presionar a Maduro ha sido la imposición de sanciones económicas, que han aislado al ilegítimo Gobierno venezolano internacionalmente porque le dificultan el acceso al sistema financiero internacional, basado en el dólar.
La Constitución venezolana recoge que es la Asamblea Nacional (AN) quien debe escoger a los miembros del CNE por lo que el Parlamento, con una notable mayoría opositora, debía ser el responsable de elegir un nuevo comité para el árbitro electoral.
Sin embargo, el TSJ contralado por el chavismo, cuya elección no reconoce tampoco la oposición, asumió la responsabilidad por la omisión que considera que la AN ha hecho del caso.
El Parlamento está, de facto, dividido, con una minoría compuesta por la bancada oficialista junto a un pequeño grupo de disidentes de la oposición atrincherados en el Palacio Legislativo. La mayoría de diputados opositores se reúnen bajo el liderazgo de Guaidó fuera del hemiciclo.
Ante esa situación, fue el cuestionado Supremo el que nombró al nuevo CNE.
Para el régimen de Maduro, el reconocimiento internacional del nuevo ente electoral es clave para los comicios legislativos que Venezuela prevé celebrar este año, pero para los que todavía no se ha fijado una fecha.