La banquera del Deutsche Bank encargada de gestionar millones de dólares en préstamos a las empresas vinculadas al presidente Donald Trump ha presentado su dimisión después de que se abriera un proceso de revisión interna que afectaba a su equipo, informó el diario The New York Times (NYT).
Rosemary Vrablic, que supervisaba una cartera de préstamos millonarios a Trump, sus empresas y familiares, abandonará el banco el 31 de diciembre por decisión propia.
Aunque las razones de su salida no están claras, ésta se da después de una revisión interna de una transacción en el 2013 entre la entidad y la compañía vinculada con Jared Kushner, yerno de Trump.
“He decidido presentar un dimisión efectiva el 31 de diciembre. Estoy deseando comenzar mi jubilación”, indicó en una declaración la veterana banquera de 60 años y directora gerente de la división de gestión de activos de la entidad.
La relación de Vrablic y Trump comenzó en el 2011, cuando se abrieron líneas de crédito por valor de US$ 300 millones para el promotor y showman que hasta aquel entonces había sido considerado una especie de paria financiero por su tendencia a los impagos.
Esos primeros préstamos sirvieron para financiar un resort de golf en Florida, una rascacielos en Chicago y el hotel Trump de Washington DC, todos ellos negocios en pérdidas y transacciones que en su momento suscitaron los temores de algunos ejecutivos del banco.
Las relaciones entre el banco alemán y Trump son objeto de varias investigaciones, entre ellas una del fiscal de distrito de Manhattan, Cyrus R. Vance, por una posible conducta penal en la manera en que se concedieron préstamos al ahora presidente saliente.
En la actualidad, Trump tiene una deuda de US$ 330 millones con el Deutsche Bank que vence en el 2023 y 2024.
La investigación interna abierta por el banco alemán tiene que ver, al menos en parte, con la compra por parte de Vrablic y otros colegas de la entidad de un apartamento de lujo en Manhattan a una empresa vinculada con Kushner, algo que puede incumplir normas de conflicto de intereses.
Según el NYT, la banquera se convirtió en una cercana de Trump y Kushner con la llegada del primero a la presidencia en el 2017.
La investigación interna podría ser más amplia de lo que se conoce hasta el momento e incluir otro tipo de transacciones sospechosas entre los Trump y el banco.