El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, estaría cerca de bloquear oficialmente la adquisición de United States Steel Corp. por parte de Nippon Steel Corp. La Casa Blanca consideró este miércoles que la empresa siderúrgica US Steel, que ha llegado a un acuerdo para su venta a la japonesa Nippon Steel, debe ser propiedad estadounidense, lo que abriría la puerta a que el presidente Joe Biden bloquee la transacción.
El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, aseguró en una rueda de prensa que Biden “ha sido muy consistente en esto” y que cree que “las compañías siderúrgicas estadounidenses deberían ser propiedad de estadounidenses”.
Kirby también declaró que la adquisición de US Steel por parte de Nippon Steel está siendo revisada por el Comité de Inversiones Extranjeras en Estados Unidos, una agencia federal presidida por el Departamento del Tesoro y que tiene la capacidad de recomendar el bloqueo de operaciones consideradas contrarias a los intereses del país.
LEA TAMBIÉN: Encuesta dibuja un panorama mixto en estados clave entre Trump y Harris
Según informaciones publicadas por medios de comunicación estadounidenses, Biden se está preparando para anunciar el bloqueo de la venta de US Steel, valorada en unos US$ 14,900 millones.
La adquisición, pensada para competir contra rivales chinos, crearía la tercera mayor siderúrgica del mundo.
Las acciones de US Steel se desplomaron hasta un 24% en Nueva York después de que el Washington Post informara primero el plan de Biden.
Tras las declaraciones de Kirby y las filtraciones sobre el posible veto presidencial, las acciones de US Steel se desplomaron y llegaron a perder más de un 20%.
La operación se ha convertido en un tema político a pocas semanas para las elecciones presidenciales estadounidenses que en gran parte giran sobre la economía y la pérdida de capacidad industrial de Estados Unidos.
Los dos principales candidatos a las elecciones presidenciales, Kamala Harris y Donald Trump, han expresado su rechazo a la venta de US Steel.
Pero el CEO de la compañía, David Burritt, declaró en una entrevista al periódico The Wall Street Journal que si la venta no es autorizada, US Steel tendrá que cerrar plantas y eliminar miles de puestos de trabajo en el país.
En este sentido, Nippon Steel aseguró este miércoles que la mayoría de los miembros del consejo de administración y responsables principales para la estadounidense United States Steel “serán estadounidenses”, de completarse la compra.
Nippon Steel también se comprometió a mantener la sede de US Steel en Pittsburgh, Pensilvania.
LEA TAMBIÉN: Fusiones y adquisiciones en EE.UU. se cuestionan futuro tras Biden
Tormenta electoral
La oferta de compra ha desatado una tormenta electoral en el estado Pensilvania, donde tienen su sede tanto US Steel como el sindicato United Steelworkers, el cual se opone al acuerdo. El CFIUS aún no ha transmitido su recomendación al presidente, dijo un funcionario de la Casa Blanca.
Bloquear el acuerdo podría motivar litigios. No hay indicios de que Nippon Steel planee abandonar el acuerdo voluntariamente, dijo una de las personas.
Nippon Steel recientemente anunció un compromiso de invertir US$ 1,300 millones en la empresa para obtener la aprobación. Además se comprometió a designar un consejo de representación de mayoría estadounidense. Además, US Steel advirtió que bloquear la compra podría significar el fin de algunas de sus plantas.
Biden lleva tiempo diciendo que US Steel, una icónica empresa estadounidense con sede en Pittsburgh, debe seguir siendo de propiedad y gestión nacional, una postura que también apoya la vicepresidenta Kamala Harris.
El candidato republicano Donald Trump también se ha opuesto.
Quienes apoyan la oferta de Nippon Steel dicen que EE.UU. no debería rechazar una oferta de una empresa en un país aliado como Japón, en particular una que podría crear una entidad conjunta con escala para competir con China.
LEA TAMBIÉN: EE.UU. critica política comercial china y promete seguir protegiendo a sus tecnológicas
Las investigaciones del CFIUS son notoriamente secretas, con pocas pistas sobre el progreso o los plazos. El CFIUS es un panel de funcionarios gubernamentales que revisa las ofertas de entidades extranjeras para adquirir empresas o propiedades en EE.UU. Está presidido por el Departamento del Tesoro, pero también incluye miembros de los departamentos de Estado, Defensa, Justicia, Comercio, Energía y Seguridad Nacional. Dado que nunca comenta las revisiones individuales y a menudo se basa en información clasificada para decidir si se opone o autoriza un acuerdo, sus investigaciones son efectivamente una caja negra.
No está claro cuál es la decisión del panel, o si ha tomado alguna.
La última vez que un presidente de EE.UU. recurrió al CFIUS para bloquear un acuerdo fue en mayo, cuando Biden ordenó a una empresa china de criptomonedas que vendiera y desalojara un terreno cercano a una base aérea. Antes de eso, solo se habían bloqueado siete ofertas.
Si se bloquea el acuerdo con Nippon Steel, el destino de US Steel sigue incierto. La empresa advirtió el miércoles de que no completar el acuerdo pondría en peligro miles de puestos de trabajo y obligaría a la empresa a desprenderse de algunas de sus instalaciones de altos hornos, incluidas las de Pensilvania, y potencialmente incluso a trasladar su sede fuera de Pittsburgh.
Con información de Bloomberg y EFE
LEA TAMBIÉN: PPK opina sobre la coyuntura electoral y fiscal en Estados Unidos