Chile planea emitir los primeros pasaportes de inmunidad del mundo para personas que se hayan recuperado del coronavirus con el objetivo de indicar que ya no son contagiosas y que pueden regresar al trabajo y a sus vidas normales.
El Gobierno chileno comenzará a emitir los “carnets sanitarios” la próxima semana, dijo hoy a la prensa el ministro de Salud, Jaime Mañalich, estableciendo un estricto conjunto de criterios para los nuevos permisos.
Sin embargo, la medida puede resultar controvertida, ya que algunas de las identificaciones se basarán en la presencia de anticuerpos contra el virus, pero muchos países han tenido dificultades para producir pruebas confiables en grandes cantidades.
Mañalich señaló que, a través de este carnet, el Gobierno identificaría a personas que “con altísima probabilidad” ya tuvieron el virus y no son capaces de transmitirlo a otros. También preocupa que el nuevo sistema genere un mercado negro de estos pasaportes.
Las autoridades sanitarias tienen “que tomar decisiones que se basan en probabilidades que se acercan a una certeza”, dijo Mañalich.
Los pacientes con sistemas inmunes comprometidos, como los pacientes con cáncer, tendrán que esperar 28 días sin síntomas para solicitar las credenciales. Los trabajadores de la salud serán evaluados cada 15 días para presentar una solicitud.
El director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos, Anthony Fauci, dijo que ese país está estudiando la posibilidad de implementar “credenciales de inmunidad”.
“Es una de esas cosas de las que hablamos cuando queremos asegurarnos de saber quiénes son las personas vulnerables y quiénes no”, dijo Fauci a New Day de CNN la semana pasada. “Esto es algo que se está discutiendo”.
Al viernes, Chile presentaba más de 9,000 casos confirmados de coronavirus y 116 fallecidos. El país ha realizado más de 95,000 pruebas, la tasa de pruebas per cápita más alta de Sudamérica.