Alemania ha elaborado una lista de medidas, incluida la obligación de llevar máscaras, límites a las reuniones públicas y el rastreo rápido de las cadenas de infección, que según las autoridades deberían permitir que la vida vuelva a la normalidad una vez que termine el confinamiento el 19 de abril.
Las propuestas, contenidas en un borrador de plan de acción compilado para el Ministerio del Interior y visto por Reuters el lunes, sostienen que estas medidas deberían ser suficientes para mantener el número de personas infectadas por cada persona por debajo de 1, permitiendo que la vida pública se reanude gradualmente.
Alemania ha estado bajo confinamiento, con restaurantes y la mayoría de las tiendas cerradas, desde el 22 de marzo. Por el impacto de la medida, que es muy probable que lleve al país más grande de Europa a una recesión este año, los legisladores están ansiosos de ver la reanudación de la vida normal.
El documento prevé un retorno gradual a la normalidad, respaldado por mecanismos que permitirán rastrear a más del 80% de las personas con las que una persona infectada tuvo contacto dentro de las 24 horas posteriores al diagnóstico.
Las personas infectadas y aquellos con quienes tuvieron contacto serán puestos en cuarentena, ya sea en casa o en hoteles. El documento asume que la pandemia durará hasta el 2021.
A cambio, las tiendas podrán reabrir, así como las escuelas en regiones seleccionadas, aunque las medidas estrictas de distanciamiento social seguirán vigentes.
Los estrictos controles fronterizos se relajarán, pero los grandes eventos y fiestas privadas seguirán prohibidos.
Siempre que haya disponibles máscaras protectoras, será obligatorio usarlas en trenes y autobuses, así como en fábricas y edificios públicos.