Todos llegamos a un punto de nuestras vidas en que nos preguntamos ¿necesito un seguro de vida? Y muchas veces nos respondemos con un “más tarde”. Especialmente si somos jóvenes, o porque no queremos pensar en que algo malo nos pueda pasar.
Actualmente hay una gran variedad de productos con diferentes tipos de coberturas, accesibles a tu situación y necesidad, según Luciano Bedoya, Gerente de División de Negocios Personales.
“Puedes comprar uno acotado y más adelante otro con mayor cobertura. Además, recuerda que tomar un seguro a edad temprana permite que mantengas una prima de menor costo”.
Un seguro de vida individual protegerá a tus seres queridos si falleces y, la mayoría de las veces, no es necesario pasar por trámites complicados para que puedan cobrarlo. Las compañías de seguros estamos apuntando a hacer de este proceso algo muy simple y rápido.
Además de proteger a tus seres queridos, los seguros de vida han evolucionado y también te permiten ahorrar e invertir y, según el tipo de producto que escojas, pueden devolverte en un periodo determinado todo lo pagado con una rentabilidad adicional.