Las áreas naturales protegidas (ANP) se están preparando para brindar la mayor seguridad y garantizar la salud de sus próximos visitantes, por lo publicó su protocolo sanitario ante el COVID-19 para la atención de visitas turísticas, la que establece las acciones de prevención y control que deberán tener en cuenta tanto el personal que labora en estos espacios, prestadores de servicios turísticos, así como los visitantes.
“Nuestra prioridad es garantizar la salud no solo de los visitantes que se encuentran entusiasmados de reencontrarse con las áreas naturales protegidas, sino también del personal guardaparque y especialista que gestiona la actividad en estos espacios, así como de las poblaciones que viven cerca o dentro de las ANP, quienes son nuestros principales aliados para que esta nueva etapa se realice con éxito”, aseveró la ministra del Ambiente, Kirla Echegaray.
-Criterios y consideraciones-
Para la reactivación de la actividad turística en las áreas naturales protegidas se viene desarrollando un trabajo articulado y continuo con los diversos actores locales que involucra tanto a autoridades regionales, provinciales y distritales, como comunidades y operadores turísticos.
Ello con el objetivo de que la próxima reapertura de estos espacios brinde las medidas de seguridad para el desarrollo de la actividad turística hacia los visitantes y no genere algún tipo de afectación para las poblaciones que viven en el ámbito de las ANP.
Como parte de los criterios que se vienen tomando en cuenta para la reactivación de las actividades y visitas turísticas, se prioriza el mantenimiento y acondicionamiento de algunas infraestructuras (miradores, senderos, centros de interpretación, puestos de control y vigilancia); así como el equipamiento de protección y bioseguridad para el personal de cada ANP (termómetro, mascarilla, entre otros).
De igual manera, se reforzarán las capacitaciones que se vienen brindando a los operadores turísticos locales sobre las medidas establecidas en el protocolo sanitario, a fin de garantizar una óptima y segura atención de los visitantes a estos espacios.
Es así que cumpliendo estos criterios, se viene evaluando el primer grupo de áreas naturales protegidas que se estarían reanudando sus actividades próximamente.
Como una segunda etapa de este protocolo, se viene trabajando conjuntamente con los actores locales en la definición de las fechas de reapertura de la actividad turística en estos espacios, tomando como referencia la evolución de las cifras de contagio del COVID-19 en cada región y las medidas del gobierno.