El sector minero se prepara para ser uno de los primeros en participar de la reactivación económica del país. Como actividad comprendida en la primera fase, solo la gran minería podrá reiniciar sus operaciones cuando finalice la cuarentena bajo los protocolos de seguridad establecidos por el Ejecutivo para prevenir nuevos contagios de Covid-19.
Aún con detalles por afinar para el sector y a la espera de los protocolos, Víctor Gobitz, presidente del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú y también CEO de Compañía de Minas Buenventura, conversó con Gestión.pe y consideró que durante esta reactivación supondrá la puesta en marcha de unidades mineras que concentran el 85% de la producción de cobre y el 50% de la producción de oro, es decir un aproximado del 80% del PBI minero del país.
“El reinicio de operaciones va a ser progresivo. El mes de mayo y mes de junio serán meses de recuperación y en las minas de mejor infraestructura, en el mes de julio, comenzaríamos a ver niveles de producción equivalentes la etapa previa a la pandemia. Mayo y junio van a ser meses de ajuste y de retome”, sostuvo.
Gobitz sostiene que, tal y como está publicada la norma, serán solo las unidades mineras que muevan más de 5,000 toneladas por día y que tengan concesiones superiores a las 2,000 hectáreas las que podrán operar. Sin embargo, considera que podrían realizarse ajustes para que la mediana minería y la pequeña minería también vuelvan al ruedo en corto plazo. El presidente del IIMP señala que el sector minero posee una gran ventaja, pues ha venido operando casi 50 días con cuadrillas de trabajadores por lo cual ya hay un conocimiento empírico de la gestión del personal para evitar contagios en las unidades mineras.
“Sin duda este es un proceso progresivo, pero yo creo que lo que se puede conversar con el Gobierno es probablemente acortar estas fases. Podemos explicarles cuáles son los estándares sanitarios de la industria y siendo bastante conservador uno podría pensar que estas fases, en lugar de un mes, podrían ser de 15 días. Las minas durante las crisis hemos mantenido cuadrillas para actividades críticas y eso ha generado un conocimiento de gestión de personas y de insumos críticos. No estamos partiendo de cero. Esa es una reflexión que espero que el Gobierno la evalúe. Lo ideal es que todo el país retome su nivel de producción en los tiempos más cortos posibles”, sostuvo Gobitz.
El representante del sector minero consideró que se trata de una actividad que opera de forma remota, con sistemas rotativos y no está ubicado en zonas urbanas. Actualmente las unidades mineras vienen adaptando sus procedimientos a los protocolos publicados por el Ministerio de Salud utilizando como precedente la experiencia para mantener las actividades críticas.
“Hemos ganado una experiencia en estos 50 días de cuarentena, entonces podría pensarse en un proceso un poquito más acelerado. Es una industria que ya tiene campamentos, tiene proveedores, tiene un estándar sanitario de seguridad y además ha vivido estos 50 días de actividad crítica. Es una peculiaridad. No es una tienda que tiene 50 días de para. Es un negocio que no se ha detenido por lo tanto vuelvo a insistir en el tema, valdría la pena revisar si estas fases se pueden acortar”, aseguró.
El CEO de Compañía de Minas Buenaventura explicó que ya se tienen nuevos estándares de habitabilidad en los campamentos mineros, lo que significará una menor cantidad de trabajadores durante la faena. Sin embargo, con el paso del tiempo esta restricción puede levantarse para ir mejorando los niveles de producción. “Hay una serie de proveedores que pueden ayudar a levantar esta restricción en plazos muy cortos”, sostuvo.
Respecto a los protocolos, Gobitz señaló que se iniciará una etapa de convivencia con el Covid-19 en el sector minero en la que sostuvo se debe ser consciente de que es “prácticamente imposible establecer un protocolo donde el contagio va a ser cero”.
“Está claro que esta pandemia tiene una característica, que es que las personas muy jóvenes son asintomáticas. Podría ser que el número de infectados que realmente tenemos es bastante mayor y deberíamos prepararnos para esa realidad. Quiero decir eso porque todos los protocolos que establezcamos nos van a minimizar el contagio, pero no es serio decir que voy a establecer un protocolo que va llevar el contagio a cero. Es tan silencioso y hay tantos espacios de contacto entre las personas que vamos a ir eliminando o cubriendo, que todos debemos ser conscientes de eso. Tenemos que reabrir la economía y minimizar contagio”, sostuvo.