Las pequeñas y medianas empresas de Estados Unidos han recibido dos tercios de los US$ 350,000 millones destinados a pymes afectadas por el brote de Covid-19, afirmó el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin.
“Hemos confirmado US$ 230,000 millones en préstamos de 4,600 acreedores”, dijo Mnuchin, al recordar que el programa fue lanzado apenas el viernes 3 de abril.
"Si su préstamo no ha sido procesado, será procesado esta semana", prometió Mnuchin.
El Congreso había asignado US$ 350,000 millones a empresas con 500 o menos empleados con la condición de que conservaran o volvieran a contratar a sus empleados.
El programa, que se puso en marcha muy rápidamente, tuvo dificultades debido a que los bancos inicialmente se mostraron reacios a prestar -a pesar de la garantía del Estado- por falta de información.
Las empresas con menos de 500 empleados pueden solicitar préstamos, que se supone les ayudan a pagar la nómina o el alquiler durante ocho semanas.
Los préstamos son concedidos por los bancos, pero el gobierno federal los garantiza y cancela la deuda si la empresa receptora mantiene a sus empleados o vuelve a contratar a los que han sido despedidos antes del 30 de junio.
Mnuchin ha pedido al Congreso que aumente esta ayuda en US$ 250,000 millones adicionales. El tema está actualmente estancado, con los demócratas queriendo añadir cláusulas para ayudar a los hospitales del país, entre otras cosas.
También señaló que "80 millones de estadounidenses trabajadores recibirán el miércoles una transferencia bancaria".
Esta es otra parte del enorme paquete de estímulo de US$ 2.2 billones aprobado por el Congreso para dar dinero directamente a los hogares estadounidenses. Según el presidente, una familia de dos adultos y dos niños recibiría un total de US$ 3,400.