Japón advierte que la competencia mundial por el gas natural licuado se intensificará durante los próximos tres años debido a una insuficiente inversión en el suministro.
Los contratos de GNL a largo plazo que comienzan antes del 2026 están completamente vendidos, según un sondeo de empresas japonesas realizado por el Ministerio de Comercio y publicado el lunes. Este tipo de contratos son esenciales para los compradores, ya que ofrecen precios estables y un suministro confiable durante muchos años.
Países de todo el mundo luchan por conseguir envíos de la planta de energía y combustible para calefacción de importantes exportadores como Catar y Estados Unidos, pero hay poco suministro nuevo para entrega antes del 2026. Mientras tanto, Europa se está apresurando a reemplazar el gas ruso de gasoductos por GNL, lo que exacerba aún más la escasez mundial de combustible.
Esto significa que los importadores se verán obligados a depender más del volátil y costoso mercado spot, que actualmente cotiza a casi el triple que los contratos a largo plazo. El año pasado, cerca del 30% de todas las entregas de GNL se realizaron por medio del mercado spot, de acuerdo con el Grupo Internacional de Importadores de Gas Natural Licuado.
Funcionarios del ministerio japonés y ejecutivos de empresas energéticas se reunieron el mismo día para discutir los planes de compra de GNL. Japón será el mayor importador mundial de GNL este año, y el combustible es la primera opción del país para la generación eléctrica.
Una falta de inversión en proyectos de exportación de GNL se traduce en que el suministro será muy limitado durante varios años, según el documento del Ministerio de Comercio. Si el flujo del gasoducto ruso a Europa se corta por completo, el mundo podría experimentar una escasez de 7.6 millones de toneladas de GNL en enero del 2025, equivalente a un mes de importaciones a Japón, señala el documento.
Japón ha estado tomando medidas para reforzar la seguridad energética permitiendo que el Gobierno compre GNL en el mercado spot en caso de que las empresas no puedan hacerlo.