Crece el financiamiento a través del mercado de valores. Al cierre de julio, 19 empresas, en su mayoría medianas, optaron por financiarse en la Bolsa de Valores de Lima (BVL).
Se concretaron 31 colocaciones de instrumentos de deuda mediante Oferta Pública (OPP), por un monto total de S/ 1,480 millones. Ello representó un crecimiento de 23%, respecto al mismo periodo del 2021, informó la BVL.
Entre los sectores empresariales más activos en la búsqueda de este tipo de financiamiento se encuentran el agroindustrial, energía, inmobiliario y financiero, indicó Mariella Córdova, Gerente Comercial de la Bolsa de Valores de Lima.
“Son distintas las necesidades que tienen las empresas, como conseguir fondos para nuevos proyectos o mejorar sus estándares de transparencia”, refirió.
Recordó que se han dado casos de medianas empresas, con una facturación de entre S/ 30 a S/ 40 millones anuales, que lograron emitir deuda y conseguir financiamiento por entre S/ 1 a S/ 5 millones.
Córdova refirió que en primera instancia las medianas empresas empiezan con emisiones de corto plazo. “Empiezan con papeles comerciales de corto plazo, hasta un año, para darse a conocer a los inversionistas. En una segunda fase empiezan a pensar en acciones, siempre según la estrategia de cada empresa”, anotó.
La BVL subraya que para acceder a este tipo de financiamiento, las empresas deben cumplir ciertos requisitos:
1. Contar con estados financieros auditados: son los estados financieros emitidos por una empresa revisados y verificados por una auditora certificada. Esta última emite un informe objetivo acerca de la razonabilidad de la situación financiera, resultados de operación y flujo de efectivo.
2. Realizar una clasificación de riesgo: a cargo de una clasificadora de riesgo, quien otorgará un puntaje que determinará la capacidad de una empresa para cumplir con sus obligaciones financieras. Esta clasificación permite medir de manera comparable el riesgo crediticio entre diferentes instituciones. Es importante considerar que a mejor clasificación se puede acceder a mejores tasas de interés.
3. Pasar el ‘due dilligence’: es una revisión legal, contable y financiera, que se realiza a la empresa que quiere listar en bolsa. Como resultado de esta revisión, los expertos generan un informe, con el análisis detallado de las áreas que se han revisado.
4. Contactar a un estructurador: el estructurador trabaja de la mano con la empresa a financiarse para orientarla y estructurar el financiamiento de acuerdo a sus necesidades. Además, se encarga de elaborar el prospecto informativo y preparar los demás requisitos y documentos que exige la Superintendencia del Mercado de Valores. Este prospecto informativo presenta los términos y condiciones de la emisión del instrumento, con la finalidad que los inversionistas tengan la información completa sobre el financiamiento a emitir.
5. Contratar a un colocador: los agentes colocadores son los encargados de realizar la venta inicial del valor. Los colocadores se encargan de informar a los inversionistas interesados sobre las características principales de la emisión, realizar la subasta para la colocación de los valores, realizar la colocación de los mismos, y al término de la subasta informar los resultados sobre las adjudicaciones.
Respecto al costo que implicará para la empresa el cumplir con estos requisitos, Córdova refirió que el monto es variable. “Se debe tomar como una inversión, donde el beneficio superará a los costos”, anotó.
La ejecutiva remarcó que la emisión a través de la BVL no solo les servirá a las empresas a diversificar sus fuentes de financiamiento, sino que también les ayudará a reducir las tasas de interés de sus créditos tradicionales con entidades financieras, pues serán empresas más confiables para el mercado.