Las materias primas podrían subir hasta un 40% —lo que las llevaría aún más a territorio récord— si los inversionistas aumentan su asignación en un momento de creciente inflación, según JPMorgan Chase & Co.
Aunque las asignaciones parecen estar por encima de los promedios históricos para las materias primas, no están muy sobreponderadas, según estrategas dirigidos por Nikolaos Panigirtzoglou. Esto sugiere que hay margen para ganancias en las materias primas, dijeron.
Las materias primas alcanzaron un récord el mes pasado cuando la invasión rusa de Ucrania agitó los mercados, disparando los precios de todo tipo de productos, desde el petróleo hasta el trigo.
Esto ha contribuido a estimular la ya elevada inflación mundial y a una respuesta más dura por parte de la Reserva Federal, lo que ha llevado a los inversionistas a sopesar una nueva ponderación de los activos entre acciones, bonos y materias primas en sus carteras.
“En la coyuntura actual, en la que la necesidad de cobertura contra la inflación es mayor, es concebible ver que las asignaciones de las materias primas a largo plazo acaben superando el 1% del total de los activos financieros a nivel mundial, superando los máximos anteriores”, escribieron los estrategas de JPMorgan en una nota del 6 de abril.
En igualdad de condiciones, esto “implicaría otro aumento de entre el 30% y el 40% para las materias primas a partir de ahora”, afirmaron.
Las materias primas han subido de forma generalizada este año, con alzas en energía, metales y cultivos. Entre los ganadores, el crudo Brent —la referencia mundial del petróleo— ha aumentado más del 30% y el mes pasado alcanzó el nivel más alto desde 2008.
Entre los principales bancos, Goldman Sachs Group Inc. también se ha mostrado sistemáticamente alcista con respecto a las materias primas, en parte por su papel como cobertura contra la inflación. Goldman advirtió en una nota del 7 de abril que se estaba produciendo una crisis mundial del cobre.