La pandemia de la Covid-19 desencadenó la aceleración de los procesos de digitalización de muchas compañías. Eso desencadenó que la infraestructura digital crítica del mundo adquiriera una mayor relevancia, incluidos los centros de datos. ¿La Inteligencia Artificial, necesaria para enfrentar los nuevos desafíos de la demanda, reemplazará eventualmente a los equipos humanos?
“Desde que las compañías empezaron a adoptar las herramientas de Inteligencia Artificial hace varias décadas, los trabajadores han expresado su preocupación ante su eventual reemplazo por estas herramientas, cuando en realidad estas han aumentado la productividad humana. Incluso antes de que la pandemia introdujera un importante cambio de paradigma en las prácticas comerciales y del consumidor, los analistas estaban evaluando cómo el factor humano y la Inteligencia Artificial podían trabajar juntos para crear sistemas híbridos”, sostiene Saida Ortiz, Channel Director LATAM de Vertiv.
En 2019, International Data Corporation (IDC) anticipó que el 50% de los centros de datos empresariales en el núcleo y el 75% de los principales sitios de TI en el borde emplearían el aprendizaje automático (Machine Learning) y los controles habilitados por la Inteligencia Artificial para el año 2023, un pronóstico cuyo periodo de tiempo se ha acelerado desde la pandemia. Al respecto, IDC sostuvo que tales controles servirían para transformar el mantenimiento y mejorar el uso eficiente de los recursos energéticos, entre otros beneficios.
La Inteligencia Artificial se ha encargado de revolucionar las operaciones del centro de datos al producir mayor eficiencia, mejorar las ofertas de servicios y reducir las repercusiones en el medio ambiente. La pandemia ha resaltado la necesidad de infraestructura crítica para trabajar mejor en un ecosistema inteligente que pueda responder a la creciente demanda de dichos servicios. Son cada vez más las compañías que buscan soluciones de Inteligencia Artificial para enfrentar las elevadas cargas de trabajo. Estas soluciones también reducen los costos operativos y aumentan la eficiencia.
Existen tecnologías de Inteligencia Artificial que brindan las herramientas esenciales a los equipos del centro de datos para recibir alertas sobre problemas que de otro modo tendrían que ser resueltos por los administradores del sistema. Estas pueden monitorear el equipo y los sistemas en tiempo real, al proporcionar soluciones o sugerir medidas preventivas. También pueden bloquear ataques a la seguridad, crear interacciones más fluidas con los clientes y reducir el consumo de energía.
En este sentido, Ortiz considera que las soluciones de Inteligencia Artificial son más un aliado de los equipos del centro de datos que una amenaza, pues les permite centrarse en tareas que verdaderamente requieran su participación. “A medida que los centros de datos aumenten sus inversiones en Inteligencia Artificial para poder satisfacer una mayor demanda provocada por el actual boom de la digitalización, estas herramientas ayudarán a los equipos a operar de forma más eficiente e inteligente”, enfatiza Ortiz.