Un grupo de bancos centrales ha desarrollado un manual para potenciales operaciones en moneda digital, revelado el jueves, en un intento por lograr un equilibrio ante la avalancha del mercado de criptodivisas y la nueva tecnología que podrían adoptar los prestamistas comerciales.
Preocupados de que la explosión del bitcóin y sus pares pueda debilitar el control del dinero, autoridades de política monetaria desde Pekín a Washington están explorando el lanzamiento de monedas digitales desde sus bancos centrales, conocidas como CBDC.
Y si bien las operaciones digitales de euros y dólares podrían aún estar a años de distancia, el trabajo de los bancos centrales está tomando ritmo a medida que los consumidores dejan atrás las monedas físicas y los títulos en favor de los pagos electrónicos y el uso de tarjetas de crédito y débito desde sus móviles.
Los siete bancos centrales -entre ellos los de Estados Unidos, Reino Unido y el BCE en la zona euro, aunque no el ente emisor de China- dijeron que el uso minorista de las CBDC debe proteger a entidades estatales y privadas y evitar que se descontrolen los sistemas de pago ya existentes.
La tecnología debería ser utilizable con los sistemas de pagos nacionales existentes, con estrategias de adhesión adaptadas a las condiciones económicas en terreno, dijeron los bancos centrales, que trabajan junto con el Banco de Pagos Internacionales (BPI).
Se debe dar tiempo al sistema financiero existente para adaptarse a la introducción de las CBDC, dijeron, señalando los riesgos de corridas bancarias si los clientes de los prestamistas comerciales cambiaran repentinamente sus ahorros a la nueva tecnología.
“Independientemente del diseño, desarrollar y ejecutar un sistema de las CBDC sería una tarea importante para un banco central”, dijeron, enfatizando en que la participación de los operadores privados debe ser monitorizada de cerca para garantizar la confianza pública en la tecnología.
A diferencia de las criptomonedas como el bitcóin, que generalmente son administradas por actores privados, las CBDC serían equivalentes al efectivo, emitidas y respaldadas por bancos centrales. Se diferencian del dinero electrónico que se utiliza en miles de millones de transacciones diarias y que se canaliza principalmente a través de los bancos comerciales.
El Banco Popular de China es el más avanzado entre las principales economías que trabajan con CBDC y está planeando un crucial lanzamiento piloto de yuanes digitales para los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022.