Las compras de deuda por la pandemia del Banco Central Europeo (BCE) fueron una parte esencial de su política monetaria durante la pandemia porque estabilizaron los mercados y redujeron los tipos de interés de la deuda soberana.
En un artículo de su boletín económico, publicado este jueves, los economistas del BCE consideran que “el programa de compras de emergencia frente a la pandemia (PEPP) se convirtió en un elemento indispensable de la respuesta de política monetaria del BCE frente a la pandemia”.
Las tenencias de bonos acumuladas del programa de compra de deuda anterior, llamado programa de compras de activos, ya habían reducido 100 puntos básicos la rentabilidad agregada de los bonos a diez años de los cuatros países más grandes de la zona del euro antes del anuncio de las compras de bonos por la pandemia, según el BCE.
Las compras de deuda por la pandemia añadieron una reducción adicional de 60 puntos básicos al final de las compras de bonos, en marzo de 2022.
Interrumpieron además el rápido distanciamiento entre los rendimientos de la deuda soberana de la zona del euro y los tipos de interés libres de riesgo durante las turbulencias en los mercados de principios de 2020.
El BCE introdujo este programa de compra de deuda en marzo de 2020, en respuesta a la extraordinaria perturbación económica y financiera provocada por la pandemia de coronavirus.
Podía adquirir bonos por valor de hasta 1,850 billones de euros y compró deuda por valor de 1,718 billones de euros, que suponen un 93 % de la dotación total.
Las compras de deuda del sector público representaron el 97 % de las adquisiciones de bonos.
El BCE aumentó las compras de bonos públicos de los países en los que más subieron las primas de riesgos porque estuvieron más afectados por la pandemia.
Las compras de deuda durante la pandemia estabilizaron los mercados y relajaron más la política monetaria del BCE porque contribuyen a bajar los tipos de interés a largo plazo.
Al reducir el volumen de bonos de los sectores público y privado en el mercado cayeron más sus rendimientos, consideran los economistas Benjamin Böninghausen, León Fernández Brennan, Laura McCabe y Julian Schumacher.
Desde que el BCE finalizó las compras de deuda netas en marzo del 2022, las operaciones se limitan a reinversiones del principal de los bonos de la cartera que vencen.
El BCE pretende reinvertir el dinero de los bonos adquiridos en la pandemia que vayan venciendo, al menos, hasta el final del 2024.
Fuente: EFE