Los nuevos préstamos bancarios en China cayeron más de lo esperado en julio frente al mes anterior, pero el crecimiento generalizado del crédito y la liquidez se aceleró mientras el banco central busca respaldar una recuperación económica gradual.
Los bancos chinos otorgaron 992,700 millones de yuanes (US$ 142,820 millones) en nuevos préstamos en moneda local en julio, una fuerte caída desde los 1.81 billones de yuanes en el mes previo y no cumplieron las expectativas de los analistas, según datos publicados el martes por el Banco Popular de China (PBOC).
Analistas consultados por Reuters habían pronosticado que los nuevos préstamos en yuanes caerían a 1.20 billones de yuanes en julio. Los nuevos préstamos fueron inferiores al nivel de 1.06 billones de yuanes del mismo mes del 2019.
Wen Bin, economista senior del Minsheng Bank en Pekín, dijo que los bancos tienden a prestar menos en el segundo semestre tras la rápida expansión del crédito en el primero debido a las políticas de estímulo.
Los préstamos para el hogar, principalmente hipotecas, cayeron a 757,800 millones de yuanes en julio desde 978,800 millones de yuanes en junio, mientras que los préstamos corporativos bajaron a 264,500 millones de yuanes desde 927,800 millones de yuanes.
Un repunte de la actividad mayor a lo esperado en el segundo trimestre ha reducido la urgencia de que el Banco Popular de China flexibilice aún más su política monetaria, pero mantendrá las condiciones expansivas para respaldar la recuperación, dijeron fuentes a Reuters.
El banco central ya ha implementado una serie de medidas de flexibilización desde principios de febrero, incluidos recortes en las tasas de interés y apoyo crediticio específico para las empresas afectadas por el virus.
China redujo su objetivo de crecimiento anual este año por primera vez desde el 2002 y prometió más gasto público debido a que la pandemia de COVID-19 afectó gravemente a la segunda economía más grande del mundo.