A lo largo de los años, me he dado cuenta de que no importa cuán preparado esté para algo, los errores son parte de la vida. Para brindarle un poco de consuelo, he aquí una guía rápida que lo ayudará a superar los resentimientos y seguir adelante con confianza después de un momento vergonzoso en el trabajo:
- Respire profundamente: cuando se sienta avergonzado, su primera respuesta probablemente será esconderse y castigarse. En este caso, haga una pausa. Si su desliz le está causando pánico y preocupación, intente disminuir su ritmo cardíaco respirando profundamente.
- Trátese con gracia y compasión: recuerde que las cosas podrían haber sido mucho peores. Se quedó dormido en una reunión, pero podría haber roncado y babeado. Derramó agua sobre la mesa de conferencias, pero podría haberla derramado sobre una pila de documentos súper importantes o, peor aún, sobre el tomacorriente. Se tropezó en el escenario, pero podría haberse lastimado. Fue capaz de levantarse, sacudirse y reírse.
- Reconozca lo que realmente sucedió y reconozca la situación o el error: es probable que nadie haya notado realmente todos los detalles que usted reproduce y quizá exagera en su mente. Si necesita disculparse después de un momento vergonzoso, por ejemplo, hágalo para tener un cierre. Es más fácil decirlo que hacerlo, porque a menudo preferimos escondernos que enfrentar la situación, pero recuerde que el cierre lo ayuda a seguir adelante.
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- Destaque la ligereza: algunos de nuestros momentos más vergonzosos son en realidad muy divertidos y con los demás pueden relacionarse con ellos (si estamos dispuestos a verlos de esa manera). Todo entorno laboral necesita más diversión. Dele algo de tiempo y cuando se sienta bien, no contenga la risa. La risa tiene muchos beneficios, incluyendo la mejora de la ingesta de aire rico en oxígeno, eliminando el estrés y aumentando la productividad.
- No está solo reviva el momento con un amigo, pero evite rumiar negativamente: si no puede dejarlo ir y su mente está dando vueltas, hable de ello con amigos de confianza. No solo escuche lo que dicen sus amigos, sino que también preste atención a su lenguaje corporal y expresiones faciales, que probablemente estarán llenas de empatía. Todos experimentan y afrontan la vergüenza de manera diferente, pero no tenemos que hacerlo solos.
- Distráigase: si aún no está listo para hablar con un amigo, haga algo que lo obligue a ocupar su mente. Me gusta ver una película, escuchar música o hacer ejercicio, de forma que estoy totalmente en otra cosa. Las distracciones ayudan al ego. Haga lo que haga, no rumie solo.
Se sentirá avergonzado en algún momento de su carrera. Lo peor que puede hacer después es derrumbarse. No es productivo invalidar sus sentimientos o usar sus errores como una indicación de su valor. Hizo algo que atrajo una atención no deseada y es perfectamente razonable que quiera esconderse por un tiempo. Pero salga de su escondite.
Los errores no lo definen. Los errores lo humanizan. Los profesionales son humanos. Todos podemos hacer más para apreciar nuestras imperfecciones tanto como nuestras competencias.
(Lan Nguyen Chaplin es profesor de marketing en la Medill School of Journalism, Media and Integrated Marketing Communications de Northwestern University).