El 24 de julio del 2018 la Comisión de Dumping, Subsidios y Eliminación de Barreras Comerciales No Arancelarias de Indecopi decidió abrir de oficio un procedimiento de investigación para hallar presuntas subvenciones en las importaciones de maíz amarillo duro proveniente de Estados Unidos.
Al proceso se apersonaron las empresas estadounidenses Archer Daniels Midland Company, Cargill Inc, Cargill Americas Incorporated, COFCO Americas Resources y Seaboard Overseas Limited, quienes exportan maíz amarillo al Perú. De igual forma el gobierno de los Estados Unidos, a través de su embajada, así como las importadoras peruanas Contilatin del Perú, ADM Andina Perú y Bunge Perú y la Asociación Peruana de Avicultura (APA).
Todos los actores cuestionaron la decisión de Indecopi, pues consideraban que no había daño a la industria nacional a través de las importaciones de maíz amarillo.
Tras una serie de audiencias y procedimientos, la Comisión de Dumping de Indecopi decidió desestimar la investigación de oficio ya que no se encontró daño a la industria nacional maicera.
Según detalla la resolución, las importaciones de maíz procedente de estados unidos pasaron de ser el 7% al 71% de la demanda nacional entre 2013 y 2017, desplazando a las importaciones de maíz amarillo procedente de Argentina. Además pasaron de 0.22 millones de toneladas en 2013 a 3.25 millones de toneladas en 2017.
Por ello, a pesar que se detectó que existen 10 programas gubernamentales estadounidenses que brindan beneficios a los productores de maíz, Indecopi decidió no poner medidas compensatorias pues recogió evidencia de que la industria nacional de maíz no resultó afectada producto de las importaciones.
En diálogo con Gestion.pe, Robert Venero, socio de Diez Canseco Abogados & PI y abogado de la Asociación Peruana de Avicultura (APA) en este procedimiento, señalo que se trata de un producto sensible que, si hubiera recibido medidas compensatorias, podría haber afectado a la inflación en el país.
"Este era un caso que termina afectando a todos. Iba a afectar a la industria avícola y a tantas otras industrias que iba a generar un efecto cadena que podía terminar afectando la inflación", explicó.
Por otra parte, aclaró que un punto fundamental para que Indecopi haya decidido no continuar con el procedimiento es que la industria local de maíz no alegó un daño por las importaciones procedentes de Estados Unidos.
"Para que se acredite que hay daño, lo primero que tiene que haber es una industria nacional que presente a la autoridad información contable y económica sobre el daño. Cuando una empresa alega que las importaciones de un país están generando un daño tiene que evidenciar como han caído sus ventas, como ha despedido trabajadores, como sus márgenes de utilidad han caído. Allí es donde radica el sustento técnico de la decisión", señaló.
Así, tras 18 meses de proceso, Indecopi descartó imponer cualquier medida compensatoria a la importación de maíz amarillo duro procedente de Estados Unidos.