La semana pasada, la Contraloría General de la República anunció que en el Perú hay unas 1,746 obras paralizadas que suman inversiones por más de S/ 22,000 millones, en los tres niveles de gobierno: nacional, regional y local.
Esta situación se da a pesar de que existe la Ley N° 31589 que tiene un procedimiento especial para reactivar obras paralizadas con más de 40% de avance, pero que hasta el momento no tiene ningún resultado.
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Pero en el mundo de las obras públicas el problema no solo son las obras paralizadas, sino también la gran cantidad de proyectos que se tienen en cartera, la misma que se sigue incrementando sin terminar los que se encuentran en ejecución.
“La paralización de las obras públicas es el síntoma final de la problemática de la inversión pública en el Perú, toda vez que la causa de fondo es la baja capacidad de ejecución y de gestión de las entidades”, afirmó el contralor de la República, Nelson Shack a Gestión.
¿Cuál es el nivel de ejecución de los proyectos?
La Contraloría reportó que, de acuerdo con la información del Sistema de Seguimiento de Inversiones del Ministerio de Economía y Finanzas (SSI-MEF), hay 457,008 proyectos registrados a nivel nacional, tanto por municipios, gobiernos regionales y el gobierno nacional.
De esta cantidad solo se han logrado culminar, pues tienen el status de haber logrado su cierre financiero, unos 69,951 obras, es decir 15.3% de toda la cartera registrada, los mismos que han significado una inversión total de S/ 65,098 millones.
Actualmente están activos 233,563 proyectos que, en conjunto, tienen un costo actualizado total que supera los S/ 978,249 millones. Mientras hay otro grupo de 146,125 proyectos, es decir el 32% de toda la cartera, que han sido desactivados permanentemente, generando un gasto al Estado de S/ 291 millones que no se podrán recuperar en la mayoría de los casos.
“Si las entidades del gobierno nacional no crearan nuevas inversiones y, considerando su capacidad de ejecución promedio registrada en los últimos años, les tomaría en promedio cinco años concluir las inversiones que actualmente tienen en ejecución. Mientras que en los gobiernos subnacionales tardaría cuatro años, en promedio, si es que no incluyen nuevas inversiones”, dijo Shack.
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¿Por qué hay poca ejecución de los proyectos de inversión?
De acuerdo con la Contraloría, hay un factor político que afecta la continuidad de las inversiones que se presenta cuando hay cambio de autoridades, pues las que inician gestión en la mayoría de casos no dan prioridad a la ejecución y culminación de las inversiones comenzadas por las administraciones salientes.
Precisó que este es un problema que se presenta principalmente en los gobiernos locales que, en los últimos años, han viabilizado o aprobado desde dos veces hasta seis veces más inversiones de las que han cerrado.
Además, hay factores más estructurales que afectan las inversiones, las mismas que determinan su retraso o paralizaciones. Por ejemplo, en el último reporte de obras paralizadas de la Contraloría se refiere que las dos principales razones para que que los proyectos de paralicen son la falta de recursos financieros o liquidez (20% del total) y el incumplimiento de contratos (18%).
Para el exministro de Economía y Finanzas, Luis Miguel Castilla, en el caso del incumplimiento contractual, uno de los temas más comunes se da por responsabilidad del propio Estado, que es la demora en la entrega de los terrenos para las obras por falta de saneamiento físico legal de los mismos o porque no se realizaron las expropiaciones necesarias.
Uno de los casos más emblemáticos de esta última situación se observa en las obras de la Línea 2 del Metro de Lima, que no ha podido avanzar según el cronograma establecido, precisamente porque el Estado no entregó a tiempo los terrenos a la empresa constructora.
Esta situación ha hecho que el Perú pierda un arbitraje internacional ante el Ciadi, pues la empresa reclamó un pago al Estado por las demoras generadas y el consecuente incumplimiento contractual.
Castilla menciona una segunda situación complicada. Y es que los expedientes técnicos con los cuales se realizan los proyectos suelen ser deficientes y generan sobrecostos cuando las obras llegan a paralizarse, e incluso retrasan más su reinicio.
“Cuando se tiene un expediente técnico válido hay una fecha de caducidad. Si es que no se han actualizado se tienen que volver a hacer. Es complejo reactivar obras paralizadas”, precisó.
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Contraloría plantea moratoria de obras
Ante el problema de la inversión pública, en la Contraloría consideran que debe evaluarse una “moratoria para ejecución de nuevos proyectos”. Es decir, que las entidades estén prohibidas de generar nuevas inversiones mientras no se terminen las que están en curso.
Actualmente ya existe un proyecto de ley en el Congreso, el 3139/2022-CR, presentado por el congresista de Fuerza Popular, Eduardo Castillo, apoyado por la Contraloría, que tiene como objeto limitar el incremento de inversiones que posteriormente no son ejecutadas y establecer medidas para el cierre de las inversiones que se encuentran en ejecución.
La iniciativa legislativa plantea que no se pueda declarar la viabilidad o aprobar inversiones para aquellas unidades ejecutoras de inversiones que no han cerrado al menos el 70% de su cartera de inversiones en moratoria.
El dato
Impulso. El ministro de Economía y Finanzas, Álex Contreras, afirmó que su portafolio prevé un “shock de inversión pública” con el que se destinarán entre S/ 700 millones y S/ 1,000 millones para reactivar obras paralizadas, dando prioridad a las que tengan mayor porcentaje de avance.