Telefónica SA está considerando una posible separación de sus activos de cable submarino de las torres que comprenden el resto de la unidad de infraestructura Telxius Telecom SA, según personas familiarizadas con el asunto.
La operadora telefónica española está discutiendo la posible división con posibles inversores y asesores, según las personas, quienes solicitaron el anonimato porque las discusiones son privadas.
La medida ayudaría a simplificar la valoración de la unidad y a reflejar los mayores múltiplos que suelen tener las torres, dijo una de las personas. Telefónica tendría que decidir si quisiera mantener o vender los cables después de la separación, dijo la persona.
Las discusiones están en una etapa temprana, no se ha tomado una decisión final y Telefónica podría decidir mantener Telxius en su forma actual. Un representante de la empresa declinó hacer comentarios.
El negocio del cable aporta alrededor del 60% de los ingresos de Telxius, según el informe de resultados del 2019, que no proporciona detalles sobre los beneficios. La unidad tuvo 841 millones de euros (US$ 942 millones) en ingresos en el 2019 y 504 millones de euros en ingresos operativos antes de depreciación y amortización.
Telefónica creó Telxius en el 2016 combinando gran parte de sus torres y sus cables submarinos para aprovechar el creciente apetito de los inversores por los activos de infraestructura. Si bien el plan era realizar una oferta pública inicial, fue descartado debido en parte a la falta de apetito de los inversores por la inusual combinación de cables y torres.
Posteriormente, Telefónica vendió una participación de 40% en Telxius a KKR & Co. en una colocación privada que valoró la unidad en 3,200 millones de euros. Un 9.99% adicional se vendió a Pontegadea Inversiones SL, el family house del magnate textil Amancio Ortega, por 378.8 millones de euros.
La revisión de Telxius se lleva a cabo en momentos en los que Telefónica atraviesa una reestructuración corporativa con el fin de reforzar sus apaleadas acciones, que el jueves alcanzaron su nivel más bajo en más de dos décadas. La compañía está revisando la mayoría de sus activos latinoamericanos para buscar posibles ventas y está creando una unidad tecnológica y una división de infraestructura para activos no incluidos en Telxius.