Subasta online de activos crece durante la pandemia

“La subasta de activos en desuso es una alternativa cada vez más tomada por empresas en busca de liquidez inmediata y por empresas que necesitan material especializado para reactivar sus negocios sin hacer grandes inversiones”, sostiene Karol Flores, gerente general de BOB.

El monto de bienes subastados este año (proyectando noviembre y diciembre) asciende a S/ 15.43 millones, mientras que el monto subastado en el 2019 llegó a S/ 6.17 millones (acumulado de S/ 21.6 millones). Entre enero y octubre de 2020, las ventas de BOB aumentaron en 250% respecto al mismo periodo del 2019.

Flores adelanta que para abril del próximo año planea comenzar operaciones en Chile y en Colombia. La meta es vender cuatro veces más que este año.

La minería, construcción y energía son los sectores que más ofertan a través de la plataforma de BOB. Los activos más requeridos por los compradores son herramientas y equipos menores (50%), materiales de construcción (20%), materiales y equipos eléctricos (20%) y maquinaria pesada (10%).

Las ventajas

Subastar activos en desuso vía online ofrece dos ventajas: mayor velocidad, que va de la mano con la llegada a una comunidad de más de mil compradores, y transparencia. El proceso de subasta es completamente encriptado y las ofertas finales son obtenidas por BOB de forma automática una vez cerrada la subasta. Además, los compradores finalistas pasan por un filtro que descarta el uso de dinero proveniente de fuentes ilegales.

“La pandemia nos ha retado a romper paradigmas respecto a las subastas online y a solucionar necesidades como la revisión en persona de los materiales antes de ofertar por ellos, realizando transmisiones en vivo a través de redes sociales o videollamadas. Esto deja un precedente de los avances que podemos dar a futuro para seguir automatizando y digitalizando el proceso”, comenta la gerente general de BOB.

Además, el modelo de negocio de BOB permite aprovechar los recursos y reducir la utilización de materias primas, y promueve la reactivación económica. “Este modelo de negocio propone ganancias a todos los stakeholders: ganan los vendedores, los compradores y también el planeta”, expresa Flores.

El índice de valor de recupero de los activos es, en promedio, 33% mayor que el que se obtiene cuando se hace una subasta por cuenta propia. El plazo de venta se reduce de dos meses a un aproximado de 10 días.