Los trabajadores de Starbucks en Estados Unidos tendrán que estar vacunados por completo contra el COVID-19 a más tardar el 9 de febrero o enfrentarse a la obligación de someterse a pruebas diagnósticas semanales.
El gigante del café con sede en Seattle dijo el lunes que la medida es en respuesta al requisito de vacunación o prueba emitido por la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA, por sus siglas en inglés) en noviembre para las empresas con más de 100 empleados.
El requisito, que se ha enfrentado a numerosas demandas judiciales, fue avalado el mes pasado por un panel de tres jueces de una corte de apelaciones federal. Está previsto que la Corte Suprema examine el requisito el viernes.
Starbucks ha pedido que sus 228,000 empleados de Estados Unidos revelen su estado de vacunación para el 10 de enero.
“Reconozco que los compañeros tienen un amplio espectro de opiniones sobre las vacunas, al igual que el resto del país”, dijo el director de operaciones de Starbucks, John Culver, en una carta enviada a los empleados a finales de diciembre. “Mi responsabilidad, y la de todos los líderes, es hacer todo lo que podamos para ayudar a mantenerlos protegidos y crear el ambiente de trabajo más seguro posible”.
Starbucks explicó que la vacunación completa significa dos inyecciones de la vacuna de Pfizer o Moderna o una inyección de la vacuna de Johnson & Johnson.
Si un empleado de Starbucks opta por hacerse la prueba cada semana, deberá pagar su costo por su cuenta y hacerse la prueba en una farmacia, clínica u otro sitio donde alguien esté observando la prueba.
Se tendrán en cuenta consideraciones religiosas o médicas, pero para trabajar en una tienda, los empleados deben someterse a una prueba semanal, dijo la empresa.
Los empleados que den positivo en la prueba podrán utilizar tiempo remunerado para aislarse. Starbucks informó que ofrece a los empleados dos instancias de aislamiento remunerado, de hasta cinco días cada una.