Las empresas rusas se han enfrentado a una gran incertidumbre sobre los pagos al extranjero tras las sanciones internacionales impuestas tanto a personas como a entidades.
Las empresas rusas se han enfrentado a una gran incertidumbre sobre los pagos al extranjero tras las sanciones internacionales impuestas tanto a personas como a entidades.

El segundo mayor productor de petróleo de Rusia está tratando de identificar a sus acreedores, mientras la empresa intenta abrirse camino a través de la compleja red de nuevas normas que rigen sus interacciones con los tenedores de bonos extranjeros tras la salida de su cofundador sancionado.