Los usuarios de Twitter ya no podrán publicar vínculos hacia sitios de redes sociales rivales, incluidas las que la compañía describió el domingo como “plataformas prohibidas”: Facebook, Instagram y Mastodon.
Es la maniobra más reciente por parte del nuevo propietario de Twitter, Elon Musk, para reprimir ciertos discursos después de que canceló una cuenta en Twitter la semana pasada que rastreaba sus vuelos en su jet privado.
“Sabemos que muchos de nuestros usuarios podrían estar activos en otras plataformas de redes sociales; sin embargo, de aquí en adelante, Twitter ya no permitirá la promoción gratuita en Twitter de plataformas específicas de redes sociales”, manifestó la empresa en un comunicado.
Las plataformas prohibidas incluyen sitios web de gran popularidad, como Facebook e Instagram, y los nuevos rivales Mastodon, Tribel, Nostr, Post y Truth Social, propiedad del expresidente Donald Trump. Twitter no dio explicaciones de por qué su lista negra incluía a esos siete sitios web, pero no a otros como Parler, TikTok y LinkedIn.
Twitter también está prohibiendo las promociones de plataformas de gestión de enlaces como Linktree, que algunas personas utilizan para mostrar dónde pueden ser halladas en distintas redes sociales y otros sitios web.
Previamente Twitter actuó contra uno de los rivales, Mastodon, después de que su cuenta principal en Twitter tuiteó acerca de la controversia de @ElonJet la semana pasada. Mastodon ha crecido rápidamente en las últimas semanas, posicionándose como una alternativa para los usuarios de Twitter que están descontentos con los cambios que Musk le ha implementado desde que adquirió la compañía por US$ 44,000 millones a fines de octubre y comenzó a reinstarlar cuentas que habían infringido las normas de los directivos previos contra los discursos de odio y otras agresiones.
Algunos usuarios de Twitter han incluido vínculos a su nuevo perfil en Mastodon y alentaron a sus seguidores a hallarlos allí. Eso ha sido prohibido en Twitter, al igual que los intentos por evadir las restricciones, tales como escribir “instagram dot com” y un nombre de usuario en lugar de un vínculo directo a un sitio web.
Instagram y Meta, la empresa matriz de Facebook, no respondieron el domingo a una solicitud de comentarios.
Musk clausuró permanentemente la cuenta @ElonJet el miércoles, y luego modificó las normas de Twitter para prohibir compartir la ubicación actual de otra persona sin su consentimiento. Luego arremetió contra los periodistas que estaban escribiendo sobre la cuenta que rastreaba el avión, la cual aún puede ser hallada en otros sitios, incluidos Mastodon, Facebook, Instagram y Truth Social, alegando que estaban difundidendo “en esencia coordenadas para cometer un asesinato”
La semana pasada Twitter suspendió las cuentas de varios periodistas que cubren a la red social y a Musk, entre ellos reporteros que trabajan para The New York Times, Washington Post, CNN, Voice of America y otras publicaciones. Muchas de esas cuentas fueron restauradas tras un sondeo que el propio Musk llevó a cabo.
Posteriormente, el fin de semana Taylor Lorenz del Washington Post se convirtió en la periodista más reciente en ser suspendida temporalmente de Twitter.
Lorenz dijo que ella y otro reportero de tecnología del Post estaban efectuando investigaciones para un artículo relacionado con Musk. Ella había intentado comunicarse con el multimillonario, pero los intentos no obtuvieron respuesta, ante lo cual trató de contactarlo el sábado publicando un mensaje en Twitter vinculado a Musk en el que le solicitaba una entrevista.
El tema específico no fue revelado en el tuit, aunque fue en respuesta a los tuits de Musk en torno a un presunto incidente en la semana sobre un “acosador violento” en el sur de California y las quejas de Musk de que algunos periodistas presuntamente estaban revelando la ubicación de su familia al referenciarla a la cuenta en que se rastreaba el avión.
Cuando regresó el sábado para ver si Twitter había emitido una respuesta, Lorenz fue notificada que su cuenta había sido “suspendida permanentemente”.
“No voy a decir que no me lo esperaba”, declaró Lorenz en una entrevista telefónica horas antes el domingo con The Associated Press. Dijo que no le dieron una razón específica para la suspensión.
Sally Buzbee, directora de The Washington Post, declaró en un comunicado el domingo que la “suspensión arbitraria de otro periodista del Post socava aún más la afirmación de Elon Musk de que pretende operar Twitter como una plataforma dedicada a la libertad de expresión”.
“Una vez más, la suspensión ocurrió sin advertencia, trámite ni explicación, en esta ocasión mientras nuestra reportera sólo buscaba comentarios de Musk para una historia”, declaró Buzbee. “A los periodistas del Post se les deberían de reactivar sus cuentas de inmediato, sin condiciones arbitrarias”.
Para el domingo a mediodía, la cuenta de Lorenz ya estaba funcionando de nuevo, y el tweet que ella pensaba había provocado su suspensión seguía publicado.
(Con información de AFP)