Desde el 2006, la empresa Sumtec venía promoviendo el uso de la tecnología orientada a la deslocalización del recurso humano. En ese entonces, la compañía facturaba menos de US$ 5 millones y, pese a crecer casi a doble dígito anualmente, el mensaje que la movilidad es el camino hacia la eficiencia no terminaba de calar en el sector empresarial.
“Ese concepto se aceleró con la llegada de la pandemia. Los ejecutivos se han dado cuenta de que pueden tener una reunión de manera mucho más eficiente desde casa. La disponibilidad no es sinónimo de presencia”, explica Jorge Lay, director comercial y de marketing de Sumtec.
Las nuevas redes de servicio basada en fibra óptica también impulsaron el crecimiento de Sumtec. “El mercado residencial exigió a las operadoras algo que tuvieron que haber hecho hace más de diez años: renovar las redes de comunicación”, dice Lay. El año pasado, Sumtec proveyó de hardware para contar con fibra óptica a por lo menos 50.000 hogares.
Así, las ventas de Sumtec crecieron 38% del 2019 al 2020. El año pasado la facturación bordeó los US$ 15 millones. Lay proyecta cerrar el 2021 en no menos de US$ 20 millones y llegar a los US$ 50 millones en el 2025.
Para lograr esa meta, es necesario seguir creciendo en el segmento corporativo y a nivel de provincias con redes de comunicación de fibra óptica. Hoy, Lima representa el 75% de las ventas de Sumtec, mientras que las regiones el 25%. Lay considera que para el 2025, el 40% de los US$ 50 millones que proyecta facturar deberían provenir desde fuera de la capital.
Recorrido empresarial
Si bien hoy la coyuntura favorece a Sumtec, el camino recorrido a lo largo de sus 30 años tuvo varios baches. Fundada en 1991, el Covid-19 no ha sido su única crisis. De hecho, Lay cuenta que la empresa estuvo a punto de quebrar.
Tras pasar con éxito por varias compañías, el ingeniero Víctor Lay, padre de Jorge Lay, fundó Sumtec, inicialmente importando las primeras centrales de Panasonic para abastecer la demanda de tecnología de las líneas telefónicas que empezaban a contratar las empresas peruanas, luego de que el gobierno de Alberto Fujimori privatizara la CPT (Compañía Peruana de Teléfonos).
“Vi la oportunidad, el producto y la marca, y acerté. En esa época vendíamos 50 centrales mensuales”, cuenta el ingeniero Lay. Las centrales de Panasonic llegaron a tener casi el 80% de participación de mercado.
Sin embargo, tras la crisis de finales de los 90, Sumtec sufrió un robo en e 2001. “Nos vaciaron el almacén y eso nos llevó al borde de la quiebra”, recuerda Jorge Lay. “Pero dije: ‘Voy a salir de esto’”, enfatiza el ingeniero, quien se deshizo de todo su patrimonio para salvar la empresa familiar.
Las tendencias
El road map de soluciones que exige hoy el mercado incluye energías renovables, movilidad, redes de fibra óptica, inteligencia artificial y data mining.
Jorge Lay considera que el segmento corporativo seguirá apostando por tecnologías orientadas a la movilidad, a la eficiencia y a la ciberseguridad, la cual incluso tendrá un rol mucho más protagónico que la movilidad.
En cuanto al segmento residencial, el ejecutivo señala que seguirá creciendo la demanda por redes de fibra óptica. “No se ha recorrido ni el 5% de la capacidad de red que el mercado necesita”, asegura.
Los planes
Entre los objetivos de Sumtec están lograr transmitir un mensaje claro y digerido sobre lo que el mercado peruano demanda. Es por eso que está preparando un congreso virtual para el segundo semestre del año con líderes globales que orienten al mercado local sobre transformación digital, ciberseguridad, tecnología para la movilidad y redes de fibra óptica.
Si bien en el 2012 la empresa familiar tuvo la visión de conquistar el mercado sudamericano, ahora planea concentrarse exclusivamente en el mercado local debido al potencial de crecimiento que ofrece.