Los accionistas de Tiffany aprobaron la compra de la célebre joyería estadounidense por parte del gigante del lujo, LVMH, por la suma récord de US$ 16,200 millones, informó el grupo del multimillonario francés Bernard Arnault.
“Esta aprobación constituye un paso significativo en el proceso de adquisición de Tiffany”, que “goza de una herencia y un posicionamiento únicos en el mundo de la alta joyería, símbolo de amor en todo el orbe”, se congratuló Arnault.
En una reunión extraordinaria, este martes, los accionistas de la casa neoyorquina “votaron por gran mayoría a favor” de la operación, según el comunicado del grupo francés.
LVMH subraya que la concreción definitiva de la transacción está programada para mediados del 2020, “bajo reserva de la obtención de las aprobaciones regulatorias y otras condiciones que son habituales”.
La joyería emplea a más de 14,000 personas y cuenta con una red de más de 320 tiendas, que administra directamente, sin pasar por los comercios minoristas multimarcas.
Fundada en 1837, la casa neoyorquina ha buscado durante años modernizar su imagen y de esta manera atraer a una clientela más joven.
Gracias a Tiffany, LVMH --que entre sus marcas de joyas ya cuenta con Bulgari y a Chaumet-- podrá competir mejor en el sector de alta gama, el único del lujo en el que no era número uno, ante su rival suizo Richemont, propietario de las marcas Cartier y Van Cleef & Arpels.
Entre todas sus actividades, el número uno mundial del lujo tuvo un año récord, totalizando una facturación de 53,700 millones de euros y una ganancia neta de 7,170 millones.