Luego de 25 años especializándose en los servicios de almacenamiento y carga aérea de productos frescos y congelados para el sector agroindustrial, Frío Aéreo comenzará, desde este martes 19 de julio, a operar su nuevo servicio de atención a la carga de importación en general, tras la ampliación de su nuevo almacén en el que, en una primera fase, invirtieron cerca de US$ 3 millones.
Así, las operaciones de carga en general se realizarán sobre un almacén de 2,500 metros cuadrados ubicados en el interior del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez en el Callao. César Bolarte, presidente de Frío Aéreo Asociación Civil adelantó a Gestión.pe que, en el mediano plazo, habría una segunda fase de ampliación apenas detecten una nueva oportunidad de crecimiento.
Para este año, en tanto, su enfoque está en cerrar acuerdos comerciales apuntando a cargas de alto valor como el tecnológico y el sector médico. Su proyección, a julio del 2023, es haber movilizado más de 1,000 toneladas con el nuevo servicio.
“En el caso del sector de tecnología, el movimiento que se está registrando de smartphones hacia el Perú es interesante, es una carga super valiosa que requiere de travesías cortas. Lo mismo pasa con los equipos médicos, animales vivos, semillas de alto valor y otros productos con alto nivel de caducidad, estas son las más importantes hacia donde apuntamos”, señaló.
Pero, ¿qué tan competitiva se mantiene la logística aérea frente a la naviera? En un contexto en el que el dólar se mantiene fluctuante y el precio del petróleo apenas está cediendo, Bolarte afirma que todavía existe un margen de diferencia entre los dos tipos de transporte, pero se ha reducido en cierto grado por los problemas logísticos que se han registrado para las embarcaciones en los primeros meses del año.
Así, indicó que en el caso de almacenamiento para carga general aérea el valor promedio para un lote de 1,000 kilogramos será de US$ 0.10 por kilo.
“Estar ubicados dentro del aeropuerto Jorge Chávez nos permite sumar competitividad en el servicio, considerando que estamos a menos de 150 metros de los aviones por lo que la carga no necesita salir del terminal para ser reenviada a otros destino local. Para nosotros es importante que en el futuro el aeropuerto cuente con dos pistas de aterrizaje y un nuevo terminal porque se convertirá en un hub que atraerá la mirada de aviones de carga con mayor frecuencia, sobre todo del Asia”, manifestó.
Más mango por avión
Además de su nueva operación, Frío Aéreo continúa con sus servicios al sector agroexportador peruano aunque el volumen de carga no se ha incrementado en los últimos años. Así, para el 2022 la proyección es movilizar cerca de 50,000 toneladas, tras cerrar el 2021 con 52,000 toneladas.
Solo en el primer semestre de este año se han exportado aproximadamente unas 27,500 toneladas de vegetales frescos por la vía aérea, 4% menos de lo transportado el 2021 durante el mismo periodo, por un menor volumen de espárragos, granada, paltas y arverjas.
No obstante, el producto que incrementó más sus envíos por este medio de transporte fue el mango fresco, con un aumento general de 12% con respecto a la campaña anterior. “Para Frío Aéreo, el incremento de este primer semestre fue de 42% con respecto al 2021″, informó Eli Bustinza, gerente general de la asociación.
¿A qué se debe? “Cada año está ganando un nicho de participación importante en la vía aérea. Este año, el crecimiento se ha explicado por los conflictos sociales internos que se han producido, como el paro de transportistas que afectó la llegada a tiempo de la fruta al puerto”, dijo.
Aeropuerto de Pisco
Frío Aéreo cuenta desde el 2017 con un terreno ubicado cerca al aeropuerto de Pisco. Bolarte recuerda que se realizó la inversión pues la expectativa en aquel momento era tener un movimiento importante de pasajeros (unos 33,000), pero a la fecha no se ha alcanzado esa cifra.
Frío Aéreo descarta desprenderse del activo. Están a la espera de los resultados de las reuniones que se llevan a cabo en una mesa técnica que es integrada por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) y también las aerolíneas.
“El nuevo aeropuerto tendría que aspirar a tener aviones cargueros, que por el momento recogen carga del sur y norte, y tendrían que aterrizar en Pisco, pero para ello es básico que se consolide un volumen de carga importante y ahí puede haber fallas logísticas. Si un avión carguero falla, los transportistas derivarán la carga hacia Lima donde tienen más opciones de trasladar. Es bastante complejo”, señaló.
El aeropuerto de Pisco se inauguró en el 2016 en medio de la promesa de atraer más de 400 mil visitantes al año. Gestión.pe informó que en febrero de este año llegaron menos de 500 personas.
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