Debido a la flexibilización de las medidas de restricción social , el mercado de pollerías en el país llegaría a facturar este año S/ 4,200 millones, un 15% más que el 2020, según proyecta Flanqueo, monitoreo de mercados.
“Y ya en el 2022, ante el avance de la vacunación y, por ende, la mayor percepción de seguridad por parte de los comensales, los referidos restaurantes podrían volver a facturar lo que registraban antes de la pandemia (2019), unos S/ 6,000 millones”, indicó el gerente general de la consultora, Javier Quiñones.
Y uno de los factores que viene impulsando la comercialización del emblemático pollo a la brasa es el reparto a domicilio, y es que ya el 70% de los limeños lo pide por delivery, cuando antes de la pandemia solo lo hacía el 30%, destacó.
“La hora de consumo en que es más pedido este plato por delivery es la cena”, detalló.
Cadenas
Y son las grandes cadenas de pollerías, las que mueven alrededor del 40% de la facturación del mercado. Es decir, este año llegarían a mover alrededor de S/ 1,680 millones, según el estudio.
En cuanto al gasto medio por ocasión de compra de pollo a la brasa, el 57% de limeños destina entre S/ 36 y S/ 55; mientras que un 25% gasta S/ 56 a más de S/ 65, y un 18% menos de S/ 35, refiere.
Resistencia
Javier Quiñones resaltó que las pollerías han sido uno de los negocios gastronómicos más resistentes a la crisis generada por la pandemia, teniendo en cuenta que solo el 10% de estos quebraron o cerraron frente al 40% de otro tipo de restaurantes (incluyendo los de menú).
“Muchos comercios a nivel nacional se convirtieron en pollerías. Incluso restaurantes bien posicionados cambiaron de especialidad para dedicarse a los pollos a la brasa. Esta es la mejor demostración de la resistencia a la crisis del plato bandera del Perú”, resaltó.
EL DATO
Aplicativos. Las pollerías que se han incorporado a apps de delivery han incrementado sus ventas, los fines de semana hasta en un 25%, según estudio de Flanqueo.