En línea con los desafíos que plantean los tratados de libre comercio que, en los últimos años, el Perú ha firmado con diferentes economías que no tienen al español como su idioma principal, el mercado del servicio de traducción ha resultado favorecido con una mayor demanda.
Por esa razón, Mary Ann Monteagudo, gerente de Learning & Language Services (LLS), considera que el comercio exterior se ha convertido en la actividad que más ha contribuido con el crecimiento de este servicio.
“El comercio exterior ha sido un factor que ha impulsado enormemente el mercado de la traducción porque el traductor es un aliado estratégico para este tipo de relaciones comerciales, sobre todo para importar o exportar productos al extranjero”, señala.
Como una muestra del crecimiento que ha tenido este mercado, la ejecutiva sostiene que ya no son dos sino cuatro las universidades que ahora ofrecen la carrera de traducción como parte de su oferta educativa.
“La Universidad Femenina del Sagrado Corazón (Unifé) y la Ricardo Palma tienen más de 50 años formando a traductores en el Perú y en los últimos años se han sumado la Universidad César Vallejo y la UPC, con lo que ya son cuatro las universidades que forman a traductores en el país, por lo que el crecimiento de estudiantes ha sido muy alto”, refiere.
Indica que otra muestra del crecimiento que ha experimentado este mercado, se refleja en la cantidad de profesionales que hoy forman parte del Colegio de Traductores del Perú (CTP). “Hasta el 2010 éramos 200 miembros, pero actualmente ya somos alrededor de 1,000. Somos uno de los pocos países afortunados en tener un colegio profesional, pero la colegiación no es obligatoria y por eso muchos optan por no hacerlo”, añade.
DEMANDA POR SECTORES
Pero no solo las empresas vinculadas al comercio exterior han favorecido el crecimiento de este mercado. Según la representante de L&LS, la demanda del servicio de traducción también ha provenido de empresas pertenecientes a los sectores minero, legal, salud e industria, en donde las firmas eléctricas, textiles y petroleras han tomado la delantera.
“En general, los traductores nos especializamos por áreas y por sectores porque no utilizamos un lenguaje coloquial sino un lenguaje técnico, por eso la importancia de la especialización”, anota.
Pero durante la pandemia, el auge de la demanda del servicio de traducción se ha materializado en las actividades económicas que aumentaron su dinamismo como consecuencia de la coyuntura como las empresas farmacéuticas, químicas, de salud y también del ámbito legal.
“En la pandemia han tenido prioridad o relevancia aquellos campos de la medicina o el derecho que han estado vinculados a esas actividades”, indica.
Con relación a los costos que implica la traducción de un documento, la ejecutiva refiere que aunque estos se determinan en función a la especialización y al idioma, hoy en día puede oscilar entre S/ 60 y S/ 300 por página. “En los últimos diez años se ha duplicado y lo mismo sucede con los sueldos de los traductores, que también depende de la especialidad y del idioma”, añade.
CRECIMIENTO
Respecto a lo que podría pasar con L&LS durante este año, su gerente reconoce que la pandemia repercutió en los resultados que tenían proyectados para el 2020, año en el que finalmente crecieron entre 15% y 20%, muy por debajo del 50% que venían expandiéndose en los últimos años.
Aun así, estima que en el 2021 la facturación de L&LS logrará un crecimiento de 30% y estarán muy enfocados a las traducciones vinculadas al derecho laboral y a las quiebras o insolvencias.
Actualmente, el 60% de los ingresos de la firma provienen de los servicios de traducción que ofrecen en más de 50 idiomas, mientras que un 30% procede de los servicios de interpretación y el 10% restante se divide entre los servicios de consultoría, localización (según el mercado y target) e internacionalización (lenguaje neutro).