El empleo a nivel nacional crece a tasas menores, ahora cercanas a cero, y las perspectivas sobre la economía no acompañan como para esperar mejores cifras.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la tasa de crecimiento de la población ocupada en el país en el último trimestre de 2022 fue acotada (precisamente 0.7%) respecto al mismo periodo del 2021.
Esto significó una continuidad en la desaceleración registrada en trimestres previos, en los que se tuvo variaciones de 7.3%, 5.8%, 3.8% con respecto a los mismos periodos del año anterior, respectivamente.
Para la economista del Instituto Peruano de Economía (IPE), Paola Herrera, las cifras van en línea con los resultados de crecimiento del PBI en el 2022, y también de su componente de inversión privada (directamente relacionado a la creación de empleo), que han venido a menos.
Según datos del Banco Central de Reserva (BCR), los registros de crecimiento del PBI trimestral del 2022 fueron 3.9%, 3.4%, 2% y 1.7%, respectivamente para los cuatro bloques del año.
Por su parte, la inversión privada creció los dos primeros trimestres menos de 1%, y en el tercero y cuarto se contrajo en 0.8% y 2.5%, en esos periodos.
“La dinámica del empleo va a la par de la desaceleración de la economía. En el último año hemos crecido a un ritmo cada vez menor, y esto claramente impacta en el empleo. La inversión privada, que es el principal motor para el trabajo sobre todo de calidad, ha sentido cada vez más el golpe en la confianza empresarial”, señaló Herrera.
El economista Carlos Casas, además de lo anterior, destacó que el empleo está siendo menos dinámico que la producción, si se observan las variaciones del último trimestre (del PBI y crecimiento de empleo).
“Está ahora más dinámico el producto que la generación de empleo. Hay más cautela en contratar, y posiblemente se esté optando por dar jornadas de trabajo más largas sin necesariamente dar una mayor remuneración. Esto se relaciona con el subempleo por ingresos (aquel que trabaja 35 horas a más con un sueldo menor al mínimo referencial), que es más alto que en años anteriores”, dijo el también el exviceministro.
LEA TAMBIÉN: Hay medio millón más de limeños en empleo precario que en el 2019
Para ambos economistas el empleo estará estacando en los siguientes meses, debido a las nada auspiciosas perspectivas sobre crecimiento de la economía, tanto por el lado de inversión como de consumo, situación que ha sido también advertida por otros analistas.
“Para este año esperamos un crecimiento incluso peor que el año pasado. El empleo, sobre todo de mayor calidad, no vendrá bien. Ante ello, los salarios (su crecimiento) tampoco acompañarán. Esto en un marco en el que la inflación (hoy en más de 8%) sigue golpeando el poder adquisitivo de la población”, dijo Herrera.
LEA TAMBIÉN: Crisis económica es la mayor preocupación de los peruanos
Caída en segmento universitario
Si se observan las cifras de empleo desagregado por nivel educativo, según el reporte de INEI, la caída más pronunciada fue de la población con educación universitaria (-3.1%).
En miles de personas esto representó 105 mil puestos de trabajo menos respecto al mismo trimestre del 2021.
Según Casas y Herrera, la menor creación de puestos formales explica la caída en los segmentos con mayor logro educativo. Esto vinculado con la caída de la inversión en el último trimestre.
Relacionado a ello, la tasa de empleo informal fue de 75.7% en el 2022, nivel poco por debajo del 2021 (76.8%), pero aún lejos del registro prepandemia (72.7%).
“Para puestos formales se requiere, por lo general, de mayores capacidades, y sin inversión esto no se da. Por otro lado, el segmento de logro educativo secundario crece (4.3%); entonces se opta por una mano de obra menos sofisticada, con menores sueldos, quizá tratando de controlar costos. Esto va en línea con querer producir más sin contratar más personal o hacerlo sin pagar grandes salarios”, apuntó Casas.
Empleo en agricultura cae
Según datos del INEI, el empleo en el sector agricultura se contrajo en 8.8% en el año pasdo, lo que significó 412 mil puestos de trabajo menos respecto a lo que fue el 2021.
Y en esta caída, para Herrera y Casas, fueron determinantes factores de oferta, principalmente por el problema de acceso a urea.
“Hay un componente fuerte de informalidad en el agro que facilita la rotación de trabajadores. En el sector agrícola, el año pasado, la creación de empleos se estuvo desacelerando por la escasez de fertilizantes que afectó el rendimiento de los cultivos en varias regiones. Asimismo, las sequías también influyeron. Las lluvias actuales son un punto a considerar”, apuntó Herrera.
Datos
- La población ocupada a nivel nacional creció 3.7% en el 2022 respecto al 2021.
- La población subempleada (que incluye al subempleo por ingresos) fue 1.7% en el 2022 respecto al 2021, y 20% respecto al 2019.