El consumo interno de cemento siguió contrayéndose en julio, pero a un ritmo menor, según datos del INEI.
En julio, este indicador se redujo en 6.1%, a una tasa menor que en junio (-10.58%) y distante de la caída profunda en abril (-16%). Empero, el consumo de cemento disminuyó en todos los meses del presente año, afectado por las bloqueos de vías a raíz de las violentas protestas en enero y febrero, y luego por las lluvias e inundaciones provocadas por El Niño Costero, que impidieron el transporte del material y la misma actividad constructora.
La adquisición de cemento habría atenuado su ritmo descendente en julio porque la inversión privada, que se redujo 8.3% en el segundo trimestre, también amortiguó su caída, sostiene el MEF.
En tanto, el sector minería e hidrocarburos desaceleró su tasa de crecimiento a 11.38% en julio, tras aumentar 15.95% en junio, y 17.37% en abril.
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¿Cómo le fue a la pesca?
La actividad pesquera, a su vez, volvió a retroceder en julio aunque con menos intensidad (-47.9%) que en mayo y junio, meses en los que la producción bajó en torno a 70%.
La pesca, en particular de anchoveta, fue afectada notoriamente por la ausencia de una primera temporada de extracción de este recurso que, por las altas temperaturas del mar en la costa norte y centro del Perú, se alejó de la zona en la que operan las grandes embarcaciones.
Al mismo tiempo, la nula explotación de anchoveta perjudicó la manufactura procesadora de harina y aceite de pescado, orientada principalmente a la exportación.
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