El Gobierno de Chile planea un segundo año de fuerte endeudamiento en los mercados locales e internacionales en el 2022 para financiar el gasto social, incluso a medida que disminuye el impacto de la pandemia.
La Tesorería del país planea vender US$ 20,000 millones en deuda este año, frente a los US$ 19,000 millones previstos para el 2021, según un comunicado del Ministerio de Hacienda.
De esos bonos, US$ 3,450 millones se utilizarán para amortizar deuda, en comparación con los US$ 6,300 millones del año pasado. Se venderán alrededor de US$ 6,000 millones en moneda extranjera, monto similar al del 2021.
“El plan de financiamiento es consistente con lo contemplado en la ley de presupuestos 2022″, dijo Andrés Pérez, economista de Banco Itaú Chile y excoordinador de Finanzas Internacionales del Ministerio de Hacienda. “Dicho ello, son montos elevados a emitir en el mercado local. Será desafiante de cumplir en caso de persistir la incertidumbre política y riesgos de nuevos retiros de ahorros previsionales”.
Ante la presión del mercado, el Gobierno planea aumentar las ventas de bonos en pesos a más largo plazo entre inversionistas internacionales. De las notas en moneda local a más largo plazo, emitirá US$ 4,000 millones mediante la modalidad de construcción de libro en los mercados globales, frente a los US$ 3,000 millones del año pasado.
El Gobierno también reducirá las ventas de letras a corto plazo en moneda local a US$ 3,000 millones respecto de US$ 4,000 millones el año pasado, con el resto en notas locales a mediano o largo plazo.
El peso chileno se fortaleció después del anuncio y subió hasta un 1.1% a 813.94 por dólar antes de retroceder y cotizar a 821.23.
El gasto público se disparó alrededor del 32% el año pasado, principalmente debido a los gastos de emergencia para contrarrestar la pandemia, con un déficit público de alrededor del 8.3% del producto interno bruto, según el Informe de Finanzas Públicas del tercer trimestre del Gobierno.
Para este año, el Gobierno ha dicho que espera recortar el gasto en un 23% y bajar el déficit al 2.8% del PBI.
El Gobierno del presidente saliente, Sebastián Piñera, ha presentado un proyecto de ley para crear una pensión universal garantizada para más del 90% de la población, a un costo de alrededor del 0.95% del PBI. Actualmente, su financiamiento está siendo discutido por el Congreso.